Hasta el momento suman 10 muertos y 40 heridos por el derrumbe de una iglesia católica en Ciudad Madero, Tamaulipas.
El Episcopado Mexicano emitió un comunicado donde lamentó los hechos y pidió la población en general unirse en oración por las víctimas y heridos.
«Nos unimos en oración con nuestra hermana diócesis de Tampico para pedir al Señor por nuestros hermanos fallecidos y lesionados», indicó en un comunicado.