CulturaLado B

Sus padres sirvieron a Hitler

Hace unos días tuve a bien leer una novela, era sobre un escritor que vivía en París, su historia es triste porque ninguna editorial quería publicarle su libro. Era una época posterior a la Segunda Guerra Mundial. En esos aires de pólvora, conoció por accidente a una joven alemana que tomo por esposa sin conocerla. Más bien fue por ayudarla. Ella tuvo una crianza noble y de niña nunca supo verdaderamente quienes eran sus padres.

Nunca estaban en casa. Cuando creció fue internada en una escuela de monjas y con el tiempo su vida se fue haciendo difícil. Era una existencia no grata de recordar, sus padres sirvieron a Hitler. Al descubrirlo huye de Alemania y viaja a París en busca de sueños. Nunca pensó que el destino le socorriera. Por accidente fue a dar con un buen escritor. Se hicieron esposos y ambos buscaban sosiego. Ella lo deja porque pensaba que él no la amaba y va en busca de nuevos horizontes. Ese día se dan un abrazo de bendición. Por dentro deseaba que se quedara, pero era más grande su timidez.

Algo valioso fue que la protegió por mucho tiempo, incluso trabajaron en un restaurante. Ella era mesera y él charlaba con el cocinero. De hecho, el escritor, ahí escribió su mejor novela, que con el tiempo sería un éxito. El problema fue que no la firmo con su autoría, ya que tenía mala estrella. Puso como autor al pizzero del restaurante, que era un tipo que nunca había agarrado un libro. “Eligió a la persona más anodina del pueblo para que lo representara: Henri Pick”. Con el paso de los años ese libro quedo abandonado en La biblioteca de los libros rechazados. “Se percató de que su existencia la componían varios trozos sueltos”. La historia cobra relevancia cuando una pareja que trabajaba en una editorial encontró un libro raro en una biblioteca cercana a París. A los pocos meses la publicación los llevo al éxito. A las personas de Francia les encanto la historia y el enigma del pizzero. Con el tiempo la relación de eso editores concluye, él por su parte sigue en la búsqueda de la verdad y descubre que ese libro no fue redactado por el pizzero.

Ese libro fue inspirado en la hermosa muchacha alemana. Ella fue el amor de un escritor tímido. Escribió ese libro para que ella algún día lo leyera y pudieran unir sus vidas. Eso sucede en las personas románticas, en ocasiones no se atreven a revelar sus sentimientos. Habían pasado muchos años y la señorita alemana ya era una anciana cuando escucha la historia del libro. Jean-Pierre Gourverc, ya había muerto y el investigador le da lectura del libro a la anciana. Ella llora y le dice que ese escritor no la conocía y le hizo el favor de casarse para que no la deportaran. Fue un caballero y si existía un sentimiento mutuo, pero la timidez de él hizo que ella lo dejara. La alemana luego de eso fue madre soltera porque un italiano la enamoro y solamente le hizo un hijo. Tuvo que luchar para darle una educación a su hijo. Perdió su vista poco a poco, hasta que se quedó ciega. Su hijo estudio opera y se convirtió en un grande. La biblioteca de los libros rechazados, de David Foenkinos. Es un libro de laberintos por sus múltiples historias, consta de 288 páginas, que alegóricamente es como si te persiguiera un minotauro en el cementerio de Montmartre. La obra fue traducida del francés por María Teresa Gallego Urrutia y Amaya García Gallego. Editado por Alfaguara, impreso en México en julio de 2017.