Si en las grandes empresas y negocios este arranque de 2021 es difícil, imagínese las necesidades o problemáticas para los trabajadores de las ladrilleras que se ubican al sur de la capital de Coahuila.
En una visita a esta zona nos encontramos con don José Ángel, un hombre que por 40 años ha desempeñado este oficio y que ha enseñado los gajes del mismo a muchas personas.
Platicó que aunque haya frío o calor, con o sin pandemia COVID-19, ellos trabajan desde temprana hora hasta que el sol se oculta.
Su pago es semanal, y a veces si no hay venta ingresa poco dinero; aun así él y sus compañeros se muestran positivos pues saben que hay trabajo.
Incluso familias completas trabajan en la ladrillera; en nuestro recorrido por esta zona ubicada en la colonia Ampliación San Nicolás de los Berros pudimos contar al menos a 100 personas dedicadas a esta labor.
Incluso niños desde muy temprana edad ayudan a sus padres a esta labor; ellos no conocen de tabletas, video juegos o teléfonos celulares, mucho menos de clases en línea, sólo saben lo que es el trabajo duro.
Los trabajadores hicieron un llamado a instituciones y políticos para que se les incluya en apoyos, beneficios y ayudas que otorgan, pues a veces se sienten un poco olvidados.
Este 6 de Reyes nadie se ha acercado a llevarles roscas paras sus niños, una despensa para ellos y sus familias, o cobijas para mitigar los fríos, y por eso les recuerdan que ellos están ahí.
