Esta Noche Buena será para muchos uno de los días más tristes del año. La pandemia del COVID-19 continúa golpeando fuertemente a nuestros amigos y familiares; hay hospitales saturados; abuelos y padres de familia que se van sin despedirse; y contagios que se multiplican día con día.
Sumado a la crisis de salud está también la crisis económica. Hay falta de empleo y el comercio está agonizando.
José Manuel López Campos, presidente de la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicio y Turismo, informó que la cuesta de enero será la peor de la que se tenga registro y será mucho más pronunciada que ningún otro año.
La ciudad de México, Jalisco y Nuevo León son algunas entidades que han anunciado nuevas restricciones con el fin de disminuir la movilidad social y frenar así los contagios.
Las compras de la temporada decembrina anuncian un inicio de año con mayor número de infecciones, hospitalizados y muertos.
Finalmente la solución está en que esta Navidad sea como siempre debió ser, reunidos únicamente con el núcleo familiar, agradeciendo por estar vivos y en algunos casos completos, pues es un hecho que no todas las familias corrieron con la misma suerte y este 2020 llorarán una silla vacía.
Lo ideal sería llegar al inicio del próximo año sin deudas innecesarias, y si es posible con un ahorro que nos permita enfrentar las vicisitudes de salud que pudieran presentarse en 2021.
Les deseo una Noche Buena tranquila, llena de paz y con su familia completa, y que Dios nos acompañe y nos cuide para llegar con bien a la cena de fin de año.
