Pittsburgh, Pensilvania. – (Agencias) El presidente Trump dijo este sábado, ante una multitud, que las elecciones presidenciales no se decidirían el martes, advirtiendo que «vas a estar esperando durante semanas»; y sugirió, sin evidencia, que podrían suceder «cosas muy malas» mientras los estados cuentan las papeletas en los días siguientes al día de las votaciones. Según informo el NYTimes.
Los comentarios de Trump los hizo en una gira de campaña, que incluyó cuatro parada, en Pensilvania, con un discurso ante cientos de personas, jactándose de sus logros y atacando a Biden, mientras predecía su triunfo la próxima semana.
En Newtown, su primera parada, Trump dijo: “Muchos, muchos días. Asi van a estar viendo el 3 de noviembre. Creo que es muy probable que no vayan a tener una decisión porque Pensilvania es muy grande”. «Vamos a estar esperando, el 3 de noviembre va a ir y venir, y no lo sabremos. Y van a tener como almejas a nuestro país».
El equipo de campaña de Trump, ha buscado agresivamente impedir que Pensilvania y otros estados amplíen el termino para votar por correo. La gente se ha desbordado para votar por este método, debido al temor de la pandemia que sufre Estados Unidos. El viernes, la Corte Suprema dictaminó que los funcionarios de Pensilvania pueden aceptar boletas por ausencia durante tres días después del martes.
«Esto es algo horrible que la Corte Suprema de los Estados Unidos le ha hecho a nuestro país», dijo Trump. «Y lo digo, y lo digo en voz alta y lo digo orgulloso.»
Sin embargo, a pesar de su preocupación por las boletas, Trump dijo que los republicanos ganarán la presidencia, y que les ira bien en las elecciones para el Congreso, haciendo a un lado las encuestas que señalan que los demócratas están liderando en los estados llamados “campo de batalla” en tofo el país.
«Se está formando una gran ola roja», dijo Trump, mostrando poco de la energía que tiene cuando habla frente a miles de personas en mítines más grandes. «Tan seguro como que estamos aquí juntos, esa onda roja se está formando. Lo ven por todos lados y no hay nada que puedan hacer al respecto».
El primer discurso lo dio frente a la granja donde George Washington planeó el cruce del río Delaware. La pequeña multitud se sentaron juntos, la mayoría sin cubrebocas. Trump ya no uso su telón de fondo típico. No pusieron a los furiosos partidarios en un estrado detrás de él.
Tenía tres mítines más previstos en Pensilvania este sábado, que se espera sean más grandes, mientras corre tratando de alcanzar a su rival, el exvicepresidente Joseph R. Biden Jr., que ha encabezado de manera constante las encuestas en el crucial estado del acero.
El presidente criticó las prácticas comerciales de Biden en un estado duramente golpeado en los últimos años por la pérdida de puestos de trabajo.
«Durante décadas, apuntaron a sus fábricas de acero, cerraron sus plantas y enviaron millones de sus trabajos al extranjero, todo mientras se llenaban los bolsillos con un interés especial en el efectivo», dijo Trump. «Nadie encarna esta traición más que Joe Biden.»
En un momento dado el teleprompter de Trump parecía que tenía problemas, pero se apegó, sin embargo, a un discurso diseñado más para presentarlo como presidente, quitándoles los arrebatos defensivos y de enojo que han predominado en sus mítines.
Se burló de Biden por usar gafas de sol y describió a su rival demócrata como simplemente un títere de demócratas liberales en el Congreso.
Para luego, irse en un largo e improvisado discurso sobre la producción de ventiladores de su administración, restándole importancia a la preocupación por el coronavirus, incluso cuando el país registro 99,784 nuevos casos el viernes, con hospitales saturados.
Insistió en que «estamos haciendo el giro» y afirmó, sin pruebas, que la vacuna para «poner fin a la pandemia de una vez por todas» estará lista en cuestión de semanas.
«Hemos hecho un trabajo increíble. En algún momento van a reconocer eso», dijo Trump después de burlarse de Biden por centrarse demasiado en el virus. «Hemos hecho un trabajo A-plus. Me doy una D, o tal vez una F, en términos de relaciones públicas.
