Washington, D.C. – (Agencias) De acuerdo con el Washington Post, Trump le pidió al Secretario de Estado de Georgia “encontrar” suficientes votos para revertir su derrota en una conversación telefónica grabada a la cual tuvo acceso el medio estadounidense.
Esto sucedió en una extraordinaria conversación telefónica de ¡una hora!, que Trump le hizo a su colega republicano Brad Raffensperger, secretario de Estado del estado de Georgia, lo que lo expertos han considerado que puede existir un delito electoral.
De acuerdo con la grabación, Trump reprendió repetidamente a Raffensperger, luego lo halagó, le rogó que actuara y lo amenazó con “vagas consecuencias criminales” si el secretario se negaba a aceptar sus falsas afirmaciones, advirtiéndole, en un momento, que estaba asumiendo “un gran riesgo”.
A lo largo de la conversación Raffensperger y el jurídico de su oficina rechazaron sus afirmaciones, explicando que Trump se basa en teorías conspirativas desacreditadas por los tribunales y que los 12,779 votos con los que ganó Biden en Georgia eran reales y legales.
Trump rechazó los argumentos. “La gente de Georgia está enojada”, dijo Trump. “Y no hay nada malo en decir, ya sabes, mmm…, que has reculado”.
Raffensperger le respondió: “Bueno señor presidente, el problema que tiene es que usted tiene datos equivocados”.
En otro momento, Trump le dice: “Así que miren, todo lo que quiero es esto. Solo quiero encontrar 11,780 votos más para nosotros. Porque ganamos el estado”.
De acuerdo con The Post, la conversación, a veces divagando, a veces diciendo incoherencias, muestra lo consumado y desesperado que está Trump por su derrota.
No está dispuesto a aceptarla, mucho menos a dejarla que se consuma, y cree que puede aún revertirla.
«No hay manera de que perdiera Georgia», insistió Trump, una frase que repitió una y otra vez en la llamada. «No hay manera. Ganamos por cientos de miles de votos».
Varios de los aliados de Trump estaban en la línea mientras hablaba, incluyendo el jefe de gabinete de la Casa Blanca, Mark Meadows, y su abogada conservadora, Cleta Mitchell, una prominente abogada del Partido Republicano, que no se conocía hasta que se sumó a los esfuerzos de Trump contra la elección.
Mitchell había dicho que la oficina de Raffensperger “ha hecho muchas declaraciones en los últimos dos meses que simplemente no son correctas”.
“Y todos los involucrados en los desafíos legales contra la elección por parte del presidente, han dicho lo mismo: muéstranos tus registros en los que confías para declarar que nuestros números están equivocados”, agregó.
La Casa Blanca, el equipo de campaña y Meadows no quisieron responder a la solicitud de The Post. En el caso de Raffensperger, declinó a hacer algún comentario.
Este domingo, Trump tuiteo que había hablado con Raffensperger y que el secretario no estaba dispuesto o era incapaz de responder a preguntas tales como “la estafa de las boletas debajo de la mesa”, la destrucción de boletas, los “votantes de fuera” del estado, los votantes muertos y más. ¡No tiene ni idea!”.
Raffensperger respondió con su propio tweet: «Respetuosamente, presidente Trump: Lo que estás diciendo no es cierto».