Donetsk, República Popular de Donetsk. – (Agencias) Rusia acusó este lunes a Ucrania de lanzar un misil a la ciudad de Donetsk, región separatista apoyada por Rusia, matando a 23 personas, entre ellos niños, por lo que el Kremlin ha acusado a Kiev de cometer un “crimen de guerra”.
De acuerdo con Moscú, el ejército de Ucrania disparó un misil Tochka-U, de fabricación soviética, contra una zona residencial de Donetsk, en uno de los ataques más graves contra la ciudad desde que Rusia envió tropas a Ucrania hace más de dos semanas.
Por su parte, las autoridades ucranianas negaron dicho ataque. El portavoz militar del gobierno de Zelenski, dijo que el misil, que llevaba una ojiva de metralla, era en realidad un cohete ruso. “Es inequívocamente un cohete ruso u otra munición; ni siquiera tiene sentido hablar de eso”, dijo Matyukhin. Sin embargo, ni las afirmaciones rusas ni ucranianas se pudieron confirmar de forma independiente.
Por su parte, los separatistas prorrusos habían informado que los fragmentos de un cohete que derribaron habían dejado entre 16 a 20 personas muertas. Sin embargo, horas después el Comité de Investigación de Rusia, que se encarga del registro y seguimiento de los crímenes de guerra, aumentaron el número de víctimas a 23 civiles muertos, incluidos niños, y 18 heridos.
Los miembros del Comité dijeron que habían abierto una investigación criminal. Más temprano, el Ministerio de Defensa de Rusia había reportado el fallecimiento de 20 personas y 28 habían sido hospitalizadas. “El uso de tales armas en una ciudad donde no hay posiciones de tiro de las fuerzas armadas es un crimen de guerra”, dijo el portavoz del Ministerio de Defensa ruso, Igor Konashenkov.
Foto y videos del ataque fueron distribuidos por los canales oficiales de la República Popular de Donetsk de Telegram, donde mostraban autos quemados, cuerpos tirados en la calle y daños en tiendas. Denis Pushilin, líder de la llamada República Popular de Donetsk, en una entrevista con la televisión estatal rusa, dijo que el cohete derribado había causado daños en áreas residenciales.
“La gente esperaba en fila cerca de un cajero automático y estaba de pie en una parada de autobús”, dijo en declaraciones transmitidas por la televisión rusa. “Hay niños entre los muertos”, dijo Pushilin, y agregó que el recuento de víctimas habría sido mayor si el cohete no hubiera sido derribado.
Los informes sobre el ataque se produjeron cuando los negociadores ucranianos y rusos se reunieron para conversar para resolver más de dos semanas de feroces combates, pero no lograron ningún avance.
