Definitivamente los festejos y celebraciones del Día de la madre de este año se dividen en dos.
Quienes tienen la fortuna de tener una vida tranquila, con las dificultades diarias, que incluso en ocasiones ni se sienten, y quienes cargan con un desaparecido en el alma.
El mismo día, con realidades distintas abismales.
Una con el corazón lleno de amor por poder abrazar y llenar de besos, y otra con el corazón triste por no saber en dónde se localiza una parte de sí misma.
Claro está, que la desaparición forzada no nació conlas últimas administraciones gubernamentales, pero también está claro que las autoridades están total y completamente rebasadas ante esta realidad.
Trata de blancas, tráfico de órganos, o una pareja incapaz de controlar su temperamento.
¿Qué más da el motivo? Finalmente, la conclusión esla misma, sillas vacías en el comedor de mamá ycorazones rotos para siempre.
