El reciente fin de semana largo, que coincidió con el Día de la Candelaria, mostró ventas mixtas para los tamaleros de la región Azteca de Coahuila. Mientras algunos celebraron buenas ventas, otros enfrentaron jornadas más tranquilas, sin la afluencia de clientes esperada.

Vendedores experimentados señalaron que los primeros días del puente, especialmente el viernes, fueron positivos, con una buena demanda, sobre todo de tamales con el tradicional «monito» dentro. Sin embargo, el Día de la Candelaria fue más tranquilo de lo previsto. «Aunque fue más lento que otros años, la gente sigue buscando el tamal», comentó uno de los tamaleros.
Por otro lado, algunos vendedores mencionaron que tanto el sábado como el domingo fueron días flojos. A pesar de la esperanza de que las ventas repuntaran en el cierre del puente, algunos no alcanzaron los números esperados. A pesar de ello, los tamaleros siguen confiando en que las ventas se mantendrán constantes durante el resto del año.

A pesar de las fluctuaciones en las ventas, todos coinciden en que los tamales son una tradición fundamental en la gastronomía local, disfrutados tanto en fechas especiales como a lo largo del año.