Smithsburg, Maryland. – (Agencias) Después de que un expolicía secuestró a sus dos hijas, junto con una amiga, otra oficial, se desató una persecución entre dos estados de la Unión Americana que culminó con el hallazgo de los cuerpos sin vida de los cuatro.
Robert Vicosa, un exoficial de Baltimore, sus dos hijas y Tia Bynum, su amiga, fueron encontrados muertos al lado de una carretera en Smithsburg, Maryland, después de una persecución, según informó la portavoz de la Policía Estatal de Maryland, Elene Russo.
Russo dijo que alrededor de las 2:30 p.m. del jueves, la policía de Pensilvania intentaba detener un vehículo que coincidía con auto involucrado en un incidente en el condado de Baltimore, Maryland, en una frenética persecución.
Dijo, que el vehículo viajaba hacia el sur de Maryland, donde los policías estatales ya lo estaban esperando.
Después de una breve persecución en Pensilvania, el vehículo se salió de la carretera y chocó contra una valla, ya dentro de Maryland, dijo Russo.
De inmediato, el equipo de negociación de crisis trató repetidamente de establecer contacto con los ocupantes del vehículo sin recibir respuesta.
De acuerdo con Russo, una densa nube de humo en el interior del vehículo impedía ver con claridad a los ocupantes.
Después de varios intentos, la policía pudo abrir las puertas. En el interior, encontraron a los cuatros con heridas de bala.
Tres de ellos: el papá, la amiga y una de las niñas habían fallecido; la otra hija fue transportada aún con vida al hospital en Hagerstown, donde falleció.
El exoficial, que había sido expulsado del Departamento de Policía de Baltimore en agosto pasado después de servir por 17 años, había sido degradado de sargento a oficial.
Vicosa, de 42 años, se metió en muchos problemas, como no presentarse a la corte cuando era requerido, conducta inapropiada con sus subalternos, dormir en el trabajo y negarse a cumplir sus deberes.
Bynum, una oficial de policía del condado de Baltimore, ahora suspendida, era muy amiga de Vicosa.
El pasado domingo, ambos se dirigieron hacía Windsor, Pensilvania, donde Vicosa secuestró a sus dos hijas, Aaminah, de 6 años, y a Giana, de 7 años, después de agredir a la madre y salir huyendo.
No se sabía nada de ellos hasta el martes, en Red Lion. Según la policía, allí Vicosa, a punta de pistola, robó un automóvil a una mujer. Sus hijas estaban con él. El miércoles robó un auto en Cockeyville.
Al día siguiente en Maryland, Vicosa y Bynum obligaron a un hombre a punta de pistola a llevarlos a varios lugares en el área de Baltimore y luego lo dejaron salir ileso, informó la estación.
El jueves, la cacería terminó en tragedia.
