El té de anís tiene un efecto sedante, antiespasmódico y carminativo, normalmente se recomienda para combatir gases, molestias, dolores intestinales, acidez, gastritis u otros problemas estomacales.
Favorece el sistema nervioso: su efecto sedante también es beneficioso para calmar los nervios, reducir los niveles de estrés, y la neurastenia, un trastorno neurótico que se detecta por sentir un cansancio inexplicable luego de actividades psíquicas o físicas.
Además ayuda al sistema respiratorio: posee propiedades antinflamatorias y expectorantes que ayudan a liberar los bronquios de fluidos que los perjudican; puedes tratar tos, bronquitis, asma o gripe.
Ingredientes:
1 taza de agua
2 cucharaditas de anís estrellado
Preparación:
- En una olla al fuego, colocar el agua y cuando hierva, agregar el anís estrellado.
- Dejar reposar de 3 a 5 minutos a fuego bajo.
- Retirar el cazo y dejarlo tapado reposando por 2 minutos más.
- Colar el líquido y disfrutar de la infusión.
- Consumir 2 veces al día, después de la comida y por no más de una semana.