Montgomery, Pensilvania. – (Agencias) El abogado Bruce Castor, famoso por defender a Donald Trump en su segundo juicio político, se convirtió en la pieza clave para que otro famoso, Bill Cosby, acusado de haber drogado y violado a una trabajadora universitaria, saliera libre.
De acuerdo con The Washington Post, el Tribunal Superior de Pensilvania emitió un impactante fallo el miércoles que anula la condena por agresión sexual de Cosby de 2018.
Según la sentencia, los cargos contra Cosby se presentaron de manera ilegal a la luz de un acuerdo no escrito que había alcanzo con el entonces fiscal del condado de Montgomery, Pensilvania, Bruce Castor.
La sentencia establece, que Castor había dicho que tenía un acuerdo con Cosby de no acusarlo penalmente por la demanda de agresión de Andrea Constand.
Según Castor, lo hizo para que Cosby declarara sin acogerse a la Quinta Enmienda en un juicio civil.
La Corte Suprema dictaminó que acusar a Cosby con base a su declaración emitida bajo el acuerdo era ilegal y violaba sus derechos al debido proceso.
Es decir, no se pude ofrecer a alguien protección contra un juicio penal para que testifique en un juicio civil, y luego usar ese testimonio para acusarlo juzgarlo penalmente.
Aquí el quid de la sentencia:
«Cuando se toma públicamente una decisión de acusación incondicional y con la intención de inducir a la acción y la confianza del acusado, y cuando el acusado lo hace en su perjuicio (y en algunos casos por consejo de un abogado), negar al acusado el beneficio de esa decisión es una afrenta a la equidad fundamental, en particular cuando da lugar a un proceso penal que se condonó durante más de un decenio. Ningún simple cambio de guardia despoja a esa circunstancia de su inequidad. … Un resultado contrario sería manifiestamente insostenible.
Violaría los principios largamente acariciados de la justicia fundamental. Sería antitético y corrosivo de la integridad y funcionalidad del sistema de justicia penal que nos esforzamos por mantener.
Por estas razones, las condenas de Cosby y el juicio de sentencia quedan anulados, y es dado de baja».
Si algo resulta familiar es porque, hace unos cinco meses, Trump, en su creciente obscuridad política, sacó a Castor para que fuera su abogado en el último minuto de su segundo impeachment, relata The Washington Post
Durante el juicio, de acuerdo con The Post, hubo una pregunta significativa: cuánto le prometió Castor a Cosby.
En 2005, el entonces fiscal del condado de Montgomery, Bruce Castor, se negó a procesar a Cosby después de que Constand, una exempleada de la Universidad de Temple, lo acusó de drogarla y violarla.
Castor fue citado como testigo por los abogados de Cosby. Declaró que no solo había decidido no acusar a Cosby, sino que había un acuerdo en vigor bajo el cual no sería acusado.
Excepto que, el comunicado de Castor sobre la no acusación de Cosby en aquel momento, no se refiere al acuerdo de no juzgarlo.
El juez del caso de Cosby, Steven T. O´Neill, presionó a Castor para que respondiera por qué no puso por escrito en el comunicado el acuerdo de juzgar a Cosby. Castor respondió que no lo creyó necesario.
«Era innecesario, porque llegué a la conclusión de que no había manera de que el caso [contra Cosby] mejorara», dijo.
El juez rechazó tal afirmación, y dijo: “no hay otro testigo del acuerdo. El conejo esta en el sombrero y ahora quieres que asuma; ‘Oye, el acuerdo se hizo, acéptalo juez’”.
Sin embargo, el Tribunal Supremo de Pensilvania llegó ahora a una conclusión radicalmente diferente. Concluyó que como Cosby no se apegó a la Quinta Enmienda, entonces era una prueba de que existía tal acuerdo.
«Cosby tampoco reclamó las protecciones de la Quinta Enmienda cuando se le preguntó sobre otras presuntas víctimas de su abuso sexual, presumiblemente porque creía que ya no conservaba ese privilegio», dice el fallo.
«De hecho, nadie involucrado con ninguno de los lados de la demanda civil indicó en el expediente una creencia de que Cosby podría ser procesado en el futuro».
Sin embargo, el juez Thomas G. Saylor, argumentó en contra de la sentencia haciendo hincapié en la falta de documentación del acuerdo.
El juez Saylor, también argumento que las declaraciones de Castor pudieron haber sido parciales, dado el caso que él, como fiscal, se había negado a procesarlo legalmente, y el siguiente fiscal que lo derrotó, Kevin Steele, lo atacó por eso durante la campaña de ambos para la Fiscalía del condado.
«El hecho de una promesa no escrita, sin embargo, fue rechazado por motivos de credibilidad [en el juicio], y el relato de Castor, de sus motivaciones subyacentes a su afirmación no acreditada de una promesa, no necesita ser contradicha por separado por la evidencia registrada, para también caerse en el camino», escribió Saylor.