Londres, Inglaterra. – (Agencias) Boris Johnson capeo por el momento el temporal este día, al enfrentar en la Cámara de los Comunes el Informe de Sue Gray, donde se reveló la investigación de la Policía Metropolitana de Londres a más de 300 fotografías y 12 fiestas, en el No. 10 de Downing Street, la residencia oficial, incluyendo una en el departamento privado del primer ministro.
La investigación concluyó que muchas de las 16 fiestas o reuniones en la residencia oficial eran “difíciles de justificar” y condenó la “falta de liderazgo y juicio” de Boris Johnson y la Oficina del Gabinete, lo que enfrentó al primer ministro con la ira de los “Torys” o parlamentarios conservadores de la Cámara de los Comunes, informó el diario inglés The Guardian.
Scotland Yard han obtenido más de 300 fotos y 500 páginas de documentos. Entre las fotografías se encuentran imágenes tomadas en las fiestas, así como, de las cámaras de seguridad que muestran a personas entrando y saliendo del edificio.
Los principales figuras “torys” estuvieron entre los que hicieron intervenciones punzantes criticando la conducta de Boris Johnson, como su predecesora, Theresa May, cuestionando su comportamiento contra las reglas, y el influyente exjefe conservador de la Cámara de los Comunes, Andrew Mitchell, exclamando que el primer ministro ya no contaba con su apoyo.
Aaron Bell, un parlamentario llegado en 2019, pronunció un discurso cargado de emisión acusando a Boris Johnson de hacerlo quedar como un tonto después de que, apegándose a las reglas que prohibían las reuniones privadas, dejo de ir al funeral de su abuela.
Johnson pareció capear el temporal en la Cámara de los Comunes al prometer una reorganización del equipo de la residencia y oficinas oficiales en el No. 10 de Downing Street. Además, aunque tarde, prometió publicar íntegramente, una vez que se termine la investigación de la policía, el informe de Sue Gray, quien es primera Segunda Secretaria Permanente en la Oficina del Gabinete y fue la responsable del informe del “Partygate”.
Los conservadores estaban consternados por la actitud desafiante de Johnson al negar la publicación del informe de Sue Gray, que fue redactado después de la investigación policial de las fiestas. Sin embargo, después de que exministros, incluidos Mark Harper y Tobías Ellwood, lo presionaron para que hiciera pública la investigación, completa y sin editar, se vio obligado a dar marcha atrás.
Varios parlamentarios conservadores que se oponen a que continue en el cargo Boris Johnson, dijeron que estaban presenciando una “muerte de 1,000 cortes” y se cuestionaban el por qué no más de sus compañeros no se sumaban a enviar cartas de censura, se requieren 54 para realizar una moción que obligue a la renuncia a Johnson.
El informe Gray identifico falta de “liderazgo y juicio”, pero dejo muchas preguntas sin respuestas, de acuerdo con The Guardian, incluso si Johnson había engañado a la Cámara de los Comunes al negar que se celebraron fiestas y decir que se siguieron todas las reglas.
El líder del Partido Nacionalista de Escocia (SNP), Ian Blackford, fue expulsado del pleno de la Cámara de los Comunes por violar el protocolo al acusar repetidamente a Johnson de haber “mentido y engañado” al parlamento.
La acusación mas dañina fue la de la fiesta el 13 de noviembre de 2020, la noche en la que el exasistente Dominic Cumming renunció, en el departamento de Carrie y Boris Johnson, según los parlamentarios. Hubo reportes de música a alto volumen y fiesta en el salón de la prensa de abajo. La supuesta reunión está ahora siendo investigada por la policía.
El primer ministro se negó a decirle al parlamento si estuvo presente en esa reunión. Incluso, anteriormente había negado que se hubiese celebrado una reunión ese día. Boris Johnson también estuvo en al menos una de las reuniones, la fiesta de “coperacha” del 20 de mayo de 2020.
Keir Starmer, el líder laborista, dijo: “No puede haber ninguna duda de que el propio primer ministro ahora está sujeto a una investigación criminal”.
Johnson se negó a responder los cuestionamientos a su conducta, pero prometió revisar la estructura del No. 10 para abordar algunos de los señalamiento de la investigación Gray. “Lo entiendo y lo arreglaré”, dijo a los parlamentarios. También trató de contratacar al hacer afirmaciones difamatorias de que Starmer no había procesado al pedófilo Jimmy Savile cuando era director de ministerio público.
Los parlamentarios conservadores inicialmente dijeron que no estaban impresionados por el desempeño de Johnson en Commons y lo acusaron de juzgar mal el estado de ánimo, pero muchos continúan reteniendo el juicio hasta que se complete la investigación Met, una nueva prueba de si Johnson recibirá personalmente una sanción por violar las reglas de Covid.
En su informe, Gray no criticó personalmente al primer ministro ni juzgó sus declaraciones anteriores, pero destacó las fallas en el corazón del gobierno. Gray enumeró 16 reuniones en 12 fechas a lo largo de 20 meses, de 2020 a 2021, que había examinado en busca de evidencia de incumplimiento de las reglas, de las cuales 12 están siendo investigadas por la policía.
Gray dijo que su informe estaba limitado por la solicitud del Met (Policía Metropolitana de Londres) de que hiciera solo una referencia mínima a las reuniones que estaban investigando. Dijo que había decidido no publicar relatos fácticos de las otras cuatro fechas porque no se sentía capaz de hacerlo sin perjuicio del balance general de los hallazgos.
Se entiende que actualmente existe un informe completo más detallado y que Gray está ansioso por ver que se ponga en el dominio público.
