Puerto Príncipe, Haití. – (Agencias) El asesinato del presidente Jovenel Moïse ha tomado dimensiones internacionales en un misterioso complot.
El complot ha adquirido dimensiones internacionales, un escuadrón de 28 sicarios formado por excomandantes militares colombianos que atravesaron por Republica Dominicana, dos estadounidenses del sur de Florida y un enfrentamiento frente a la embajada de Taiwán.
Pero, poco se sabe sobre quién fue el autor intelectual del asesinato y sus motivos mientras la investigación presionaba el viernes.
Las autoridades haitianas han solicitado la ayuda internacional para buscar a los autores intelectuales. Sin embargo, siguen preguntan sin responder en esta atribulada nación de 11 millones de habitantes.
No se sabe sin el complot viene de los enemigos más obvios de Moïse o se encuentra en el círculo cercano a él.
El fiscal haitiano Bed-ford Claude declaró a The Washington Post que ha solicitado el “interrogatorio” de Dimitri Hérard y Jean Laguel Civil, altos mandos responsables de la seguridad del presidente.
Mientras en la capital, ciudadanos enojados incendiaban vehículos usados supuestamente por los sospechosos y capturaban a parte de los colombianos, quienes estaban escondidos sin ningún plan de escape.
En estos momentos se han concentrado en el interrogatorio a los participantes. De acuerdo con las declaraciones conocidas, uno de los estadounidenses detenidos declaró que habían sido contratados como traductores en una operación para arrestar a Moïse.
El jueves a última hora, las autoridades colombianas confirmaron que algunos de sus conciudadanos detenidos eran excomandantes militares del ejército de ese país y que habían iniciado una investigación por su participación.
De acuerdo con The Washington Post, el secretario de Defensa de Colombia, Diego Molano, informó que la Interpol habían solicitado información sobre seis ciudadanos colombianos presuntos responsables del asesinato, dos de ellos fallecidos en enfrentamiento con las fuerzas del orden.
“Inicialmente, la información indica que son ciudadanos colombianos, miembros retirados del ejército nacional», dijo.
Por su parte, el general Jorge Luis Vargas, jefe de la Policía Nacional de Colombia l, dijo que la información sobre las finanzas, hora y fecha de los vuelos de los involucrados será enviada a Puerto Príncipe par colaborar en la investigación.
En el caso de los dos ciudadanos estadounidenses de ascendencia haitiana, fueron identificados como James Solages, de 35 años, y Joseph Vincent, de 55.
Según declaración del juez de la instrucción, Clement Noël, al periódico Le Nouvelliste de Haití, los estadounidenses afirmaron ser intérpretes de los asaltantes. Uno de ellos, Solages, declaró que había “encontrado el trabajo en Internet”.
«Decían que eran traductores. La misión era arrestar al presidente Jovenel Moïse, en el marco de un mandato de un juez de instrucción, y no matarlo», dijo el juez.
El jueves, la embajada de Taiwán en Puerto Príncipe dijo que había autorizado a la policía haitiana a entrar a terrenos de la sede diplomática y habían arrestado a 11 de los sospechosos que se habían atrincherado.
«El hecho nuevo más importante es que aparentemente los mercenarios no debían matar al presidente, sino arrestarlo. ¿por qué? Y quién les pagó sigue siendo un enigma», dijo Robert Fatton, profesor en la Universidad de Virginia que ha escrito extensamente sobre Haití.
«Ahora, si los mercenarios están mintiendo a la policía haitiana es otra cuestión».