Barcelona, Cataluña. – Han sido sentenciados por la justicia española, los tres acusados por los atentados yihadistas de 2017 en Barcelona y Cambrils. .
La Audiencia Nacional ha impuesto 53 años de prisión a Mohamed Houli y 46 a Driss Oukabir, por pertenencia a organización terrorista y tenencia de explosivos, si bien no los considera culpables de los homicidios, al no haber sido autores materiales de la masacre.
En cuanto al tercer acusado, Said Ben Iazza, ha sido condenado a 8 años de cárcel por colaboración con organización terrorista.
Los atentados de 2017 fueron el mayor golpe del yihadismo en España desde el 11-M. En la tarde del 17 de agosto, una furgoneta entró en La Rambla de Barcelona embistiendo a decenas de personas. Catorce murieron. El conductor, que logró huir, fue localizado y abatido más tarde.
En la madrugada siguiente, el resto de los miembros de la célula irrumpieron en otro vehículo en el paseo marítimo de Cambrils. Armados con cuchillos y un hacha se enfrentaron a los policías de un control y fueron abatidos.
De acuerdo con la agencia de noticias europea EuroNews, los atentados cobraron 16 muertos y 140 heridos de distintas nacionalidades. En el juicio trascendió que la célula yihadista también preparaba ataques contra la Torre Eiffel, la basílica de la Sagrada Familia o el estadio Nou Camp del FC Barcelona.
