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CUESTIONADO

Hugo López Gatell, subsecretario de Salud Federal, sigue siendo cuestionado y duramente juzgado por haber viajado durante el fin de año 2020 a Oaxaca. 

El “hombre de la pandemia” habló respecto al tema ante los medios de comunicación y señaló que ahí pasó unos días junto a sus familiares; nada más le faltó decir “Sí era yo, y ¿Qué tiene?”.

El punto es, que ni usted ni yo, hemos respetado al 100 por ciento el famosísimo «quédate en casa» porque si así fuera ya hubiéramos salido de esta pesadilla. 

Finamente, después de 11 meses de trabajo intenso, son absolutamente necesarios para cualquier ser humano unos días descanso, claro está, respetando las reglas de sanidad para evitar la multiplicación de contagios de COVID-19.  

El presidente Andrés Manuel López Obrador pidió a las autoridades de Campeche y Chiapas que los niños regresen a clases, y después de 11 meses de encierro abrir las escuelas.

Ambas entidades tienen varias semanas en semáforo verde y con contagios a la baja, por lo que el riesgo se disminuye y podrían volver pronto a las aulas. 

El presidente López Obrador también aseguró que en estos estados se buscará que los maestros tengan la vacuna después de los trabajadores de la salud. 

Qué pena con nuestro presidente; ¿Pero por qué tendrían los docentes la vacuna antes que los abogados, los ingenieros, los comerciantes y los reporteros?

Finalmente los maestros son los únicos que pudieron resguardarse durante todos estos meses y seguir manteniendo su empleo. 

Todos los demás estuvimos obligados a salir a seguir buscando el pan para nuestras familias, incluso con el riesgo de contagiarnos. 

Los maestros que se formen, pues la fila es muy larga. 

Lo que en semanas pasadas hemos visto como crisis a consecuencia de la pandemia es sólo la punta del iceberg. 

La verdadera emergencia económica, según la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, apenas está por golpearnos. 

Esta Comisión reportó que en los primeros nueve meses de 2020 los bancos registraron en su conjunto una disminución de un millón 600 mil tarjetas de crédito. Son créditos cancelados por no tener movimiento en sus cuentas o por falta de pago. 

Pero apenas se empiezan a sentir los incrementos autorizados de este año 2021, y el encarecimiento que las autoridades nunca reconocen pero que el pueblo siempre siente. 

Lo que es un hecho es que seguimos en la misma incertidumbre de cuando todo esto inició, por lo que tenemos que revisar nuestros gastos con lupa para pasar el tan mencionado último tirón de la pandemia.