Dallas. Texas. – (Agencias) Con carreteras inundadas que requirieron un esfuerzo para rescatar autos, mientras otros abandonados flotaban en las calles , inundaciones repentinas azotaron a Dallas-Forth Worth. En algunas áreas, sufrieron una caída de agua que sucede una vez cada mil años, según informó el diario The Washington Post.
Mientras la lluvia continúa cayendo en Dallas y sus alrededores, algunos pluviómetros registran más de 10 pulgadas hasta el momento. En el aeropuerto internacional de Dallas-Fort Worth, se registró una caída récord de 3.5 pulgadas de lluvia en una hora. Por su parte, el Servicio Meteorológica Nacional (NWS) en Fort Worth advirtió de un riesgo continuo de “inundaciones repentinas que pueden ser una amenaza de vida”, ampliando su advertencia a Dallas y a sus alrededores, hasta la 1 p.m.
De acuerdo con la advertencia, ya han caído al menos 10 pulgadas de lluvia y aún faltan entre 2 y 4 pulgadas. También advirtieron que el riesgo de daños por las inundaciones es “considerable”, pidiéndoles a los residentes que no manejen por carreteras inundadas y que se trasladen de inmediato a terrenos más altos. También se emitieron advertencias de inundaciones repentinas para Canton, Texas.
La torrencial lluvia que produjo las inundaciones es la última de este tipo ocurridas en las últimas semanas en Estados Unidos. En solo una semana, tres de estas lluvias que suceden una en cada mil años cayeron en Kentucky, ST Louis, y el sureste de Illinois. Si bien el término de “una en cada mil años” es controvertido, se usa para señalar un evento que se espera que suceda cada mil años, lo que significa solo el 0.1% de posibilidades que ocurra en un determinado año.
Que sucedan con más frecuencia estos eventos es producto del cambio climático, de acuerdo con lo que han descubierto los expertos. Una atmosfera más cálida, capaz de retener más humedad, pude producir una torrencial lluvia. Según el informe de 2022del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático, se espera que aumente en el futuro la tasa de eventos de precipitación extrema que causan inundaciones severas.
El lunes se estaban llevando varios rescates acuáticos en el área de Dallas-Fort Worth. A las 8 a.m., el Departamento de Bomberos de Dallas habían atendido 141 emergencias relacionadas con la inundación, según Jennifer J. Moreno, vocera de la Oficina de Manejo de Emergencias de la ciudad. A las 10 a.m., en el caso del Departamento de Bomberos de Fort Worth, se habían atendido 25 llamadas de rescate de aguas altas, y la policía de Dallas respondía 43 llamadas de rescate adicionales.
El meteorólogo del condado de Harris, Texas, Jeff Lindner, señaló en Twitter que un indicador meteorológico registró en 12 horas casi el 40 por ciento de su precipitación anual típica. Más tarde, ese mismo indicador registró más de 14.9 pulgadas de lluvia, aún dentro de las 12 horas. Esas tasas de caída son prácticamente imposibles de absorber para los suelos, mucho menos en superficies pavimentadas, sin escorrentía que pueden causar inundaciones repentinas.
El Servicio Meteorológico Nacional no pudo emitir una advertencia en su oficina de Fort Worth por un problema de comunicación tras una caída de una línea del proveedor Verizon, confirmó el Servicio a The Washington, aunque la oficina dice que toda vía está trabajando en estrecha colaboración con otras oficinas asociadas para mantenerse al tanto.
Antes de la torrencial lluvia del lunes, el área de Dallas-Fort Worth se encontraba en medio de una dura sequía. Durante los últimos tres meses, todo el condado de Dallas ha estado experimentando al menos una sequía extrema, de acuerdo con el Monitor de Sequía de Estados Unidos. Las ciudades de Texas experimentaron temperaturas y sequedad casi récord el mes pasado, lo que provocó un grave déficit de precipitaciones. Pero las fuertes lluvias que caen sobre partes del estado hasta el lunes pueden no traer suficiente alivio, advirtió el NWS.
