Highland Park, Chicago. – (Agencias) Una persona declarada de interés fue arrestada después de una persecución que duró horas poco después de un tiroteo masivo durante un desfile del 4 de julio en Highland Park, un suburbio de Chicago, que dejó al menos seis muertos y 30 heridos.
Robert “Bobby” Crimo III, quien fue identificado por las autoridades como una persona de interés, fue detenido el lunes por la noche no muy lejos de la ruta del desfile, según la policía de Highland Park. Informaron que aún no se han presentado cargos.
De acuerdo con las autoridades, el atacante apuntó a las personas que estaban disfrutando del desfile del Día de la Independencia desde un techo. Se cree que usó un rifle de alto poder, que fue recuperado en la escena. No se informó de los motivos del ataque. La policía calificó el tiroteo como “un acto aleatorio de violencia”.
La tarde de celebración se convirtió en un caos cuando estallaron disparos a lo largo de la ruta del desfile, mientras los asistentes al desfile huían, dejando sillas volcadas, abandonando las mantas de picnic y las banderas estadounidenses que ondeaban. Los líderes y analistas se apresuraron a resaltar el simbolismo de uno de los pasatiempos preciados del país siendo destruido por un problema claramente estadounidense.
“Es devastador que una celebración de Estados Unidos haya sido destrozada por nuestra plaga estadounidense única”, dijo el gobernador de Illinois, JB Pritzker, en una conferencia de prensa. En un comunicado, agregó: “No hay palabras para el tipo de monstruo que acecha y dispara contra una multitud de familias y niños que celebran un día festivo con su comunidad”. Dijo que el estado estaba de luto por las familias que perdieron a sus seres queridos. Al señalar que el dolor y las oraciones no fueron suficientes, prometió «acabar con esta plaga de violencia armada».
Más de una docena de oficiales, algunos armados con rifles habían rodeado la casa de Robert E Crimo III, de 22 años, que se hace llamar “Bobby”, fue identificado como una persona de interés por los oficiales el día de hoy.
Brigham Temple, director médico de atención inmediata en el Sistema de Salud de la Universidad de NorthShore en Illinois, dijo que el hospital recibió 26 pacientes, 25 de los cuales sufrieron heridas de bala.
“Algunos de ellos eran menores, algunos de ellos eran más severos”, dijo. Las edades oscilaron entre ocho y 85 años, dijo. No estaba seguro de cuántos niños habían resultado heridos, pero dijo que eran al menos cuatro o cinco. Dijo que 19 de los heridos pudieron ser dados de alta. Dos permanecen en el hospital en condición estable, mientras que los otros fueron trasladados a hospitales cercanos para recibir tratamiento.
