Columbia Británica, Canadá. – (Agencias) Los canadienses han quedado conmocionados después de que el domingo, a plena luz del día, fueron asesinados dos personas en la ciudad turística canadiense Whistler, en Columbia Británica; y 24 horas después, tras el registró de alertas policiales por “múltiples tiroteos” en las afuera de Langley, cercana a la frontera con Estados Unidos, que dejó 4 víctimas fatales.
Según el informe de la policía local a la cadena CBC de Canadá, no existía relación alguna entre ambos tiroteos. Los asesinatos en Whistler estuvieron relacionados con pleito de pandillas; mientras que los asesinatos en Langley se relacionaron con personas sin hogar. La policía de Langley confirmó más tarde que cuatro personas habían muerto en el ataque, incluyendo el tirador, y dos personas quedaron heridas gravemente.
Los tiroteos han causado un shock en un país que no está acostumbrado a los niveles de violencia armada más allá de su frontera sur. En los últimos días se ha incrementado los incidentes mortales con armas de fuego en Columbia Británica, incluida la muerte de un hombre que fue baleado por la policía el sábado y la muerte de dos mujeres por bala después de un tiroteo en Chilliwack.
El domingo, la policía de Whistler respondió a un tiroteo cerca del Hotel Sundial poco después del mediodía. En el lugar murió una persona y la otra fue declarada muerta en el hospital, de acuerdo con el comunicado de la Real Policía Montada de Canadá (RCMP). Poco más tarde, la policía dijo que el tiroteo estaba relacionado con pleito de pandillas que se han vuelto más violentas.
Las víctimas fueron identificadas como Satindera Gill y Meninder Dhaliwal. El hermano de este último murió en un ataque dirigido contra él el año pasado en Vancouver, Columbia Británica. Amabas víctimas tenían antecedentes penales y eran conocidos por la policía, según informaron los investigadores de homicidios.
“Creemos que este es un incidente dirigido” en relación con un conflicto de pandillas en curso, dijo el sargento Timothy Pierotti del Equipo Integrado de Investigación de Homicidios. “Aunque este fue un tiroteo diurno descarado en una aldea concurrida, no se cree que haya más riesgo para el público, gracias a la rápida respuesta de los equipos de Mar y Aire de la RCMP”, agregó.
Según la policía se realizaron múltiples arrestos y se encontró cerca del tiroteo un vehículo incendiado que se cree está asociado con el ataque, un sello distintivo en tiroteos. A través de videos que fueron subido a las redes sociales, se pueden observar a dos personas del sexo masculino boca abajo en un charco de sangre. El tiroteo conmocionó a la unida comunidad turística, la gente se apresuró a ponerse bajo resguardo mientras los informes de balaceras se extendían por la aldea.
A través de un comunicado en Twitter, la administración del resort, Whistler Blackcomb anunció que cerraría por el resto del día por “respeto a los afectados”. Los elevadores permanecían abiertos mientras todos los demás clientes fueron bajados de la montaña. “Estamos conmocionados y profundamente entristecidos por este acto de violencia sin sentido, y apoyamos a nuestra comunidad”, escribió el operador del resort.
Al día siguiente, los habitantes de la Columbia Británica se despertaron con alerta policiacas que describían un tiroteo en la ciudad de Langley y un “incidente” en el municipio vecino de Langley, una entidad separada. La primera alerta de la RCMP se dio a las 6:15 a.m. De acuerdo con la información de la policía el lunes en la tarde, fueron llamados “en las primeras horas de la mañana” después de haberse reportado los tiroteos.
La policía encontró los cadáveres de tres personas en tres diferentes lugares. Dos hombres fueron encontrado muertos ha causa de las heridas, mientras que una mujer fue llevada al hospital gravemente herida. El sospechoso, descrito como un hombre blanco con cabello obscuro, que vestía un overol marrón y una chaqueta de camuflaje, fue encontrado más tarde cerca del lugar de uno de los tiroteos. La policía le disparo, al igual que a otro hombre. El sospechoso murió a causa de las heridas.
De acuerdo con la policía local, la investigación no ha encontrado relación entre las víctimas y el sospechoso. Más tarde, la cadena Canadian Broadcasting Corp. Informó que el alcalde de Langley, Val van den Broek, se quebró a la hora de hablar del impacto del crimen en la comunidad. “Lo siento, estoy bastante emocionada en este momento”, dijo. “Soy voluntario con las personas sin hogar y los conozco, y también es muy personal para mí”.
Canadá introdujo una nueva legislación de control de armas en mayo que, de aprobarse, implementaría un «congelamiento nacional» en la compra, importación, transferencia y venta de armas de fuego, limitando efectivamente la cantidad de tales armas que ya están en el país.
