Washington, D.C. – (Agencias) De acuerdo con The Washington Post, el ejército estadounidense llevó a cabo un ataque el viernes con aviones no tripulados (drones) contra un objetivo del Estado Islámico en Afganistán la tarde del viernes.
Esta acción representa la primera respuesta al ataque suicida en el aeropuerto de Kabul donde murieron 13 marines de Estados Unidos y al menos 170 afganos.
El presidente Joe Biden había enviado un mensaje a los terroristas que las fuerzas estadounidenses “los persiguieran y los harían pagar”, después de que el grupo de milicianos conocidos como Estado Islámico-Jorasán o ISIS-K se responsabilizó por el ataque.
De acuerdo con el capitán de la Marina de Estados Unidos Bill Urban, portavoz militar, el objetivo era un “planificador” o estratega de ISIS-K, sin informar si había desempeñado algún papel en el ataque suicida.
El sábado por la tarde, el presidente Joe Biden advirtió de otro ataque terrorista en Afganistán. “Es altamente probable” en las próximas 24 o 36 horas, señalando que la situación sigue siendo “extremadamente peligrosa”.
El ataque estadounidense con drones mató a dos milicianos de ISIS-K de “alto perfil”, dijeron el mismo sábado funcionarios del Pentágono.
“Está acción no fue la última”, dijo Biden.
El portavoz del Pentágono, John Kirby, agregó que la participación de estos individuos en el Estado Islámico fue suficiente para convertirlos en un objetivo. Sin embargo, se negó a identificarlos.
Por su parte, el portavoz talibán, Qari Muhammad Yousaf Ahmadi, dijo a The Washington Post el sábado, que arrestaron a dos miembros de ISIS-K involucrados con el ataque suicida que produjo la carnicería a las afuera del aeropuerto de Kabul el jueves pasado.
“Están bajo investigación”, dijo el portavoz, a la vez que se negó a identificar a la pareja o a dar más detalles de su posible participación.
