Luçon, Francia. – (Agencias) Un hombre acusado por incendiar una catedral al oeste de Francia el año pasado, fue arrestado el lunes acusado del asesinato de un sacerdote católico.
Este asesinato ha levantado el debate sobre la ley de migración, debido a que el acusado es un inmigrante indocumentado que enfrentaba un juicio de deportación.
De acuerdo con la Diócesis de Luçon, el sacerdote asesinado era el padre Olivier Maire, jefe de la Orden Misionera de Montfortain, en la pequeña ciudad de Saint-Laurent-sur-Sèvre.
Aunque se han dado pocos detalles por parte de la policía, la repercusión en los medios ha sido grande en un país que se ufana de su secularismo, pero es un ferviente católico.
El presidente Emmanuel Macron elogió el amor y la generosidad del padre Maire.
«En nombre de la Nación, rindo homenaje al padre Olivier Maire», dijo Macron en Twitter. «Cálidos pensamientos para los Montfortianos y todos los católicos en Francia. Proteger a los que creen es una prioridad».
El sospechoso, Emmanuel Aballi Zenga, un ruandés inmigrante de 40 años había estado viviendo en la Orden de Maire mientras esperaba el juicio por el incendio de una preciada catedral gótica en Nantes, que había confesado el año pasado, según Yannick Le Goater, fiscal adjunto.
Recientemente, el sospechoso había discutido porque quería salir de las instalaciones de la orden, donde estaba bajo supervisión judicial, y había sido trasladado a un hospital psiquiátrico a finales del mes pasado, dijo Le Goater.
No estaba claro dónde estaba el sospechoso este mes. Se entregó a la policía el lunes por la mañana.