JESÚS LÓPEZ / FACTORPALAÚ, COAHUILA.-
Juan Carlos Díaz de apenas 16 años y con problemas de lenguaje, que estudia en el Centro de Atención Múltiple CAM-18, tomó la decisión en este periodo vacacional, limpiar vidrios para ganarse unos pesos y poder ayudar a sus padres con el gasto de la despensa. Acudiendo desde las 08:00 de la mañana todos los días afuera del Oxxo, ubicado sobre el bulevar Hidalgo, Juan Carlos se ofrece a limpiar los vidrios de los vehículos y camionetas que llegar a comprar algún artículo al centro comercial y se va a su casa ubicada en el barrio los Cuervos, hasta que se mete el sol.
En el lapso de la pandemia que todavía no culmina su padre se ha quedado en varias ocasiones sin trabajo aunado a una serie de situaciones que el todavía por su edad y su discapacidad no entiende, pero sí capta los mensajes por medio del actuar de las personas, y al ver la necesidad que había en casa decidió actuar y no estar de ocioso, por lo que junto con un amigo decidió, comenzar a ganarse la vida a su manera, limpiando vidrios.
Su padre días trabaja y días no debido a que le dan descanso en su empleo, su madre se dedica a cuidar a su hermanito de 4 años, así que con lo que gana al día aunque no mencionó la cantidad aporta en los gastos de la casa, lo primordial que no falte la comida en casa, dice el jovencito de 16 años.
Tengo que aprovechar ahorita que estamos en vacaciones, ya cuando regresemos aunque no creo porque el coronavirus sigue me daré tiempo para continuar trabajando limpiando vidrios y así poder ayudar a mis padres, así que pido a la gente que viene a comprar a la tienda en su carro me dé la oportunidad de limpiarle el vidrio y poder ganarme unos pesos para ayudar en la casa. Mucha gente dice que no hay trabajo, pero la verdad sí hay, si le buscas encuentras trabajo, no nada más trabajándole a otro se obtiene un empleo, uno puede ser su propio jefe si quiere, el querer es poder y claro que sí hay trabajo, mírenme a mi limpiando vidrios, dijo Juan Carlos.
