Washington, D.C. – (Agencias) De acuerdo con funcionarios de Ucrania, la ofensiva en gran escala anunciada por Rusia en el este del país ha comenzado, luego de que las fuerzas rusas intensificaron los ataques con misiles, incluyendo uno a la ciudad occidental de Lviv, que mató a siete personas, siendo las primeras victimas mortales en esta ciudad hasta ahora desde que comenzó la guerra.
El ejército de Rusia ha estado acumulando tropas y suministros en preparación al gran asalto a la región de Donbas, objetivo principal del Kremlin después de que sus fuerzas se retiraron de Kiev tras cumplir con la primera fase de la operación militar en Ucrania “Ahora se puede afirmar que las tropas rusas han comenzado la batalla por Donbas, para la que se han estado preparando durante mucho tiempo”, dijo el presidente ucraniano Volodímir Zelenski. “Una gran parte de todo el ejército ruso ahora está concentrado en esta ofensiva”.
Olensky Danilov. Secretario del Consejo de Defensa y Seguridad Nacional de Ucrania, dijo que Rusia atacó a lo largo de casi toda la línea del frente de Donbas y Kharkiv, abriéndose paso en dos pequeñas ciudades. El Pentágono no contradijo la evaluación ucraniana, pero adoptó un enfoque más cauteloso, y el portavoz John Kirby dijo que los rusos “están dando forma y estableciendo las condiciones para futuras operaciones ofensivas”.
El Pentágono dice que las fuerzas rusas están aprendiendo de su frustrado asalto a Kiev mientras se trasladan a Donbas, en el este de Ucrania, en un intento por evitar que se repitan los errores anteriores.
“Se están moviendo en artillería pesada, se están moviendo en habilitadores de comando y control, se están moviendo en aviación, particularmente en apoyo de aviación rotativa”, dijo un alto funcionario de Defensa de Estados Unidos, hablando bajo la condición de anonimato de acuerdo con los términos establecidos por el Pentágono. “Parece que están tratando de aprender de las lecciones del Norte, donde no tenían las capacidades de mantenimiento adecuadas”.
Según el funcionario, aún así, es poco probable que los esfuerzos para reforzar su maquinaria de guerra con capacidades de reparación y reabastecimiento resuelvan sus problemas generales, las sanciones han afectado “principalmente en el ámbito de los componentes”. La falta de piezas está afectando la viabilidad de varios sistemas de armas rusos, incluyendo las municiones de precisión guiadas.
“Ya se han enfrentado a un problema en términos de reposición de su inventario debido a los componentes de algunos de estos sistemas”, dijo el funcionario, y agregó que incluso Rusia tiene “preocupaciones sobre qué tan rápido y cuánto pueden aumentar su propia producción nacional de artículos de defensa». “Las sanciones están teniendo un efecto en su capacidad para hacer eso”, dijo el funcionario.
A pesar de eso, la maquinaria de guerra rusa sigue adelante. Según el funcionario, en los últimos días, Rusia ha movido 11 batallones de grupos tácticos en Ucrania, elevando este numero a 76 en este país. Se cree que todos ellos están en la zona este, donde Rusia ha reenfocado sus tropas. Probablemente otros 22 batallones de grupos tácticos que habían abandonado el norte de Ucrania por Bielorrusia, estan siendo reenviados y reabastecidos.
Dijo que los combates más intensos del país se están produciendo en Popasna, una ciudad en el este de Ucrania que se encuentra entre Lugansk y Donetsk, en un área que había estado bajo control ucraniano antes de la invasión rusa. De acuerdo con el funcionario, los combates allí son parte de una estrategia regional para obligar a las tropas ucranianas a salir de los centros de población y tránsito clave como Popasna y Slovyansk, que fueron lugar de intensos combates en la guerra de Ucrania en 2014 contra los separatistas respaldados por Rusia, antes de terminar finalmente bajo control del gobierno de Kiev.
El funcionario dijo que parece que las fuerzas rusas esperan moverse desde Izyum, una ciudad a lo largo de la frontera occidental de Donbas que ha experimentado intensos combates persistentes, al sureste de Slovyansk y Popasna, reforzando y expandiendo así sus bastiones en Donbas.
Esas áreas se encuentran aproximadamente a 125 millas al norte de Mariupol, la ciudad portuaria del este que ha sido paralizada por un amargo asedio interrumpido por severas bajas civiles durante semanas. El funcionario señaló que, si Rusia tiene éxito en su intento de tomar y establecer el control sobre Mariupol, liberaría a casi una docena de grupos tácticos de batallones para comprometerse en otros lugares. “Esa es otra fuente de mano de obra que podrían usar si llegara a eso”, dijo el funcionario.
