Lado B

Las verdaderas causas de la perdida del olfato

La pérdida de olfato también conocida como anosmia, es una sintomatología muy frecuente y esta asociada al Covid-19.

Esta patología se produce cuando una inflamación intranasal u otra obstrucción impide que los olores ingresen en el área olfatoria.

Recientemente se realizo un estudio en la Universidad Johns Hopkins y se llego a la conclusión que la mecánica del olfato es a nivel celular cuando el SARS-CoV-2 invade el cuerpo.

Para realizar la investigación el científico Ho y colegas juntaron tejidos bulbo olfativos en la base del cerebro , esta parte es capaz de trasmitir impulsos nerviosos y trasmite información sobre olores, de 23 personas que murieron a causa de COVID-19 y un grupo de control de 14 que fallecieron por otras causas y que no tenían SARS-CoV-2 detectable en el momento de su muerte.

Los investigadores querían aprender tres cosas de su estudio de los dos grupos: los niveles de degeneración (daño) de
las neuronas en el sistema olfativo, la cantidad de axones olfativos perdidos y la gravedad de la microvasculopatía (enfermedad de los pequeños vasos sanguíneos). Lo que encontraron, según Ho, no fue inesperado.

“Cuando comparamos los tejidos de pacientes sin COVID-19 con los de personas que habían sido infectadas con SARS-CoV-2, especialmente los que tenían una pérdida total o disminuida del olfato, encontramos que el grupo con COVID mostró una lesión vascular más grave y muchos menos axones en el bulbo olfatorio -relata Ho-. Y eso no cambió cuando controlamos estadísticamente el impacto de la edad, lo que sugiere fuertemente que estos efectos no están relacionados con la edad y, por lo tanto, están vinculados a la infección por SARS-CoV-2″.

Con esto se llego a la conclusión que la pérdida de olfato por COVID sería consecuencia de la inflamación nerviosa y no del virus, y se demostró que la falta de olfato es por el daño que sufre el cuerpo al defenderse de la infección por Coranavirus.