Internacional

Liz Cheney, otra víctima de la venganza de Trump

Con la caída de Cheney, solo dos de los 10 legisladores republicanos de la Cámara de Representantes que votaron a favor del impeachment para destitutir a Trump por el asalto al Capitolio del 6 de enero de 2020, estarán en las papeletas

Jackson, Wyoming. – (Agencias) Liz Cheney, representante por Wyoming, una de las política más respetadas y congruentes, miembro del Partido Republicano, apostó su carrera política justamente a su congruencia y apoyó, primero, el juicio político, o impeachment, al entonces presidente Donald Trump y, segundo, participa activamente en la investigación de la Cámara de Representantes sobre los hechos del 6 de enero de 2021 cuando el Capitolio fue asaltado por una turba empujada por Trump, a quien acusó de tratar de dar un golpe de estado.  

Estaba todo listo para el enfrentamiento que significaba, por un lado, la venganza de Trump por a su apoyo a Harriet Hageman, la candidata que enfrentaría a Cheney, y por el otro, la reafirmación de Liz Cheney de su congruencia ante la defensa del sistema estadounidense. Cheney perdió por amplió margen. Los republicanos del estado más trumpista, le cobraron el atrevimiento de enfrentarse a quien hoy controla los destinos del Partido Republicano.

Liz Cheney

Desde los primeros conteos se puedo observar la gran diferencia entre Hageman y Cheney. Con el 38% de los votos escrutados, Hageman tenía el 64% contra el 33% de Cheney. El llamamiento a los demócratas para que dieran su apoyo no fue suficiente. Cheney compareció temprano, aún sin rebasar el 50% del escrutinio, mostrándose conocedora de la situación. “Ningún cargo en esta tierra es más importante que los principios que todos hemos jurado proteger”, dijo al recordar que en las pasadas elecciones ella ganó con el 73%. 

“Había un camino claro para repetirlo”, ha dicho, pero habría implicado mentir, traicionar a sus principios, a la ley y a la democracia apoyando los bulos de Trump: “Ese era un camino que no podía ni quería tomar”. Cheney es el cuarto republicano de la Cámara que pierde una primaria después de votar a favor en el juicio político para destituir a Trump el año pasado, y que en su mayoría están listos para abandonar el Congreso después de una derrota fulminante.

Harriet Hageman (i) y Donald Trump (d)

Trump también tuvo otras dos contiendas de alto perfil en Alaska, donde también sacó el triunfo. la senadora moderada Lisa Murkowski (R) se enfrentó a un retador respaldado por Trump, Kelly Tshibaka, mientras que la exgobernadora Sarah Palin, una republicana antisistema respaldada por Trump compitió para el único escaño de Alaska en la Cámara.

Pero Cheney se destacó al denunciar la presidente Trump, lo que la convirtió en un blanco prioritario. Ya había sido despojada de su posición número tres en el liderazgo del grupo de representantes republicanos por sus colegas, quienes ahora la despachaban por negarse a dejar de criticas a Trump y por su papel destacado como miembro del Comité que investiga los hechos del 6 de enero e 2021, cuando una turba empujada por el presidente Trump asaltó el Capitolio con un resultado funesto.

“Esta elección ha pasado, pero ahora empieza el verdadero trabajo”, añadió. “No podemos abandonar la verdad y ser un país libre”, ha dicho también tras volver a atacar a Trump en su discurso y decir que ningún negacionista electoral, refiriéndose a quienes sostienen que las elecciones de 2020 fueron un fraude, merece ocupar un cargo y que las mentiras y teorías de la conspiración de Trump provocan violencia, que ya lo hicieron el 6 de enero y lo han vuelto a hacer ahora tras el registro de Mar-a-Lago, que ha provocado que se disparen las amenazas.

“Ningún patriota estadounidense debería disculpar estas amenazas o dejarse intimidar por ellas. Nuestra gran nación no debe ser gobernada por una turba provocada a través de las redes sociales”, ha sentenciado.

Dijo que “tras el 6m de enero de 2021, haría lo que haga falta para que Donald Trump no vuelva a pisar la Oficina Oval”, tras evocar a quienes lucharon por la libertad en la Guerra Civil estadounidense y advertir los riesgos para la democracia y la libertad si no se aparta a quienes no reconocen los resultados electorales. “Nuestra supervivencia [como democracia] no está garantizada”, ha dicho.

Con la caída de Cheney, solo dos de los 10 legisladores republicanos de la Cámara de Representantes que votaron a favor del impeachment para destitutir a Trump por el asalto al Capitolio del 6 de enero de 2020, estarán en las papeletas el próximo 8 de noviembre.