Internacional

Mélenchon y la izquierda llaman a la huelga general en Francia

“Jubilación a los 60 años”, se leía en un cartel. “Incluso los veganos quieren zamparse a los ricos”, decía otro, y otro rezaba simplemente: “En cólera”

París, Francia. – (Agencias) La izquierda y su líder Jean-Luc Mélenchon han salido a las calles de París en un movimiento que eleva la presión al presidente de Francia, Emmanuel Macron, en el cierre de una difícil semana entre huelgas sindicales y confrontación legislativa.  La manifestación “contra la vida cara y la inacción climática” ha sacado a la calle a miles de franceses que enfrentan un aumento en el costo de la vida y la crisis energética.

El gobierno de Macron, ante la negativa de la oposición de aprobar el presupuesto, prepara la aplicación del artículo 49.3 que le permite esquivar a la Asamblea Nacional e imponer una ley presupuestal por decreto.

Annie Ernaux y Jean-Luc Mélenchon (2o. y 3o.. de izq. a der)

La oposición legislativa de izquierdas bajo el liderazgo de La Francia Insumisa (LFI), que incluye a socialistas, ecologistas y comunistas, participaron en la organización de la marcha a la que calcularon unos 120,000 manifestantes, que según la policía fueron unos 30,000.

Mélenchon, que fue acompañado por la flamante Nobel de literatura Annie Ernaux, llamó a la “huelga general” el próximo martes, jornada de paros y protestas convocados por la CGT y otros sindicatos en defensa de las mejoras salariales. Los trabajadores de las refinerías de petróleo llevan casi tres semanas en huelga, lo que ha dejado este fin de semana una de cada tres gasolineras sin combustible suficiente.

“Hoy estamos dibujando la construcción de un nuevo Frente Popular que en el momento llegado ejercerá el poder en el país”, declaró el líder de la izquierda. “Tendremos la conjunción de la movilización popular, la movilización sindical y la crisis institucional. Por eso he dicho que [Macron] está carbonizado, y lo mantengo”.

Jean-Luc Mélenchon

 “Jubilación a los 60 años”, se leía en un cartel. “Incluso los veganos quieren zamparse a los ricos”, decía otro, y otro rezaba simplemente: “En cólera”. “Estamos aquí para demostrar que somos muchos los que queremos que suban los salarios, para apoyar a los huelguistas de las refinerías y para que se vea que no bajaremos la guardia”, dijo Isabelle, una maestra jubilada y militante insumisa de Normandía, que había llegado a París con un grupo en dos autobuses.

A la pregunta del reportero del diario español El País sobre si creía que Macron escucharía las reclamaciones de los manifestantes, respondió: “No. Pero nos da igual”. De todas maneras, aseguró, el presidente no tendrá más remedio que escuchar “cuando en los surtidores no quede gasolina y los trenes estén parados”. En otras palabras: una huelga general.

La marcha fue una demostración de fuerza de Mélenchon apenas 5 meses después de las elecciones legislativas cuando la izquierda se convirtió en la primera fuerza de oposición, aunque el mayor partido de la oposición es la extrema derecha de Reagrupación Nacional (RN) dirigida por Marine Le Pen. la huelga en las refinerías y el conflicto social que se anuncia para las próximas semanas han realzado el mensaje de Mélenchon.