Nueva York, EUA. – (Agencias) Ahora fue la arena del Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas (ONU), donde se volvieron a enfrentar Estados Unidos y Rusia por Ucrania, mientras el representante ruso advertía que Ucrania será responsable de su propia destrucción si socava los acuerdos de paz existentes.
La advertencia de Vasily Nebenzya, representante permanente de Rusia ante la ONU, se dio durante la sesión del Consejo de Seguridad de la ONU mientras la agenda continua con la diplomacia al más alto nivel para desactivar el conflicto de Ucrania.
Por su parte, el Departamento de Estado de Estados Unidos confirmó haber recibido la contra respuesta de Moscú a la carta entregada por Estados Unidos como respuesta a las demandas de Rusia para desactivar el conflicto y donde se expresaban una serie de puntos de convergencia para iniciar las conversaciones; mientras que Sergéi Lavrov, ministro de Relaciones Exteriores de Rusia la calificó como una respuesta que tocó asuntos secundarios para Rusia. El Departamento de Estado se negó a revelar el contenido de la respuesta rusa argumentando que no “negociaran en público”.
Aunque la sesión del Consejo del lunes no produjo ningún resultado para reducir la amplia división entre Rusia y Estados Unidos y sus socios occidentales, pero proporcionó una prueba de fuerza diplomática en el escenario mundial.
Nebenzya comenzó la reunión ridiculizando las afirmaciones occidentales de un ataque ruso planeado como «histéricas» y culpó a Ucrania por no cumplir con los acuerdos de Minsk de 2014 y 2015, que se suponía que pondrían fin al conflicto entre el gobierno de Kiev y los separatistas respaldados por Rusia en las regiones de Lugansk y Donetsk.
El representante permanente de Rusia, también culpó a Occidente de “llenar de armas” a Ucrania que, dijo, “utilizará contra la población civil del este del país y “violan los acuerdos de Minsk”. Nebenzya terminó su discurso ante el consejo de seguridad con una advertencia.
«Si nuestros socios occidentales presionan a Kiev para que sabotee los acuerdos de Minsk, algo que Ucrania está… haciendo voluntariamente, eso podría terminar de la peor manera para Ucrania», dijo Nebenzya. “Y no porque alguien lo haya destruido, sino porque se habría destruido a sí mismo y Rusia no tiene absolutamente nada que ver con esto”.
Estados Unidos había pedido un debate de emergencia sobre Ucrania como parte de una campaña diplomática para defenderse de lo que según Washington y sus aliados dicen que es una invasión rusa planificada de Ucrania. Como parte de esa campaña, Estados Unidos y el Reino Unido anunciaron que las finanzas de los dirigentes cercanos a Putin serían el objetivo si se lleva a cabo un ataque.
Por su parte, la representante de Estados Unidos, Linda Thomas-Greenfield, dijo que incluso mientras se debatía el tema en Nueva York, Rusia seguía sumando a las más de 100,000 tropas que ya estaban reunidas alrededor de las fronteras de Ucrania, y en cuestión de días tendría 30,000 solo dentro de Bielorrusia, en referencia a las fuerzas que participarán en ejercicios conjuntos anunciados por Rusia.
“Rusia ya ha utilizado más de 2,000 vagones de tren para trasladar tropas y armamento desde el otro lado de Rusia hasta la frontera con Ucrania”, dijo Thomas-Greenfield. “Rusia también ha trasladado casi 5,000 soldados a Bielorrusia, con misiles balísticos de corto alcance, fuerzas especiales y baterías antiaéreas. Hemos visto evidencia de que Rusia tiene la intención de expandir esa presencia a más de 30,000 soldados cerca de la frontera entre Bielorrusia y Ucrania, a menos de dos horas al norte de Kiev, a principios de febrero”.
En sus réplicas al consejo de seguridad, Nebenzya insistió en que los ejercicios militares no eran nada fuera de lo común. “El despliegue de tropas rusas dentro de nuestro propio territorio ha ocurrido con frecuencia en diferentes escalas antes y no ha causado ningún tipo de histeria”, dijo, afirmando que las tropas rusas estaban “en sus propias áreas de despliegue y cuarteles donde estaban antes”.
Los analistas militares que estudian las imágenes satelitales de la concentración en Bielorrusia dicen que las unidades militares provienen del lejano oriente de Rusia y su despliegue en cantidades tan grandes tan lejos de la base no tiene precedentes desde la Guerra Fría.
El enviado de Bielorrusia ante la ONU, Valentyn Rybakov, dijo que las tropas rusas estarán en su país para ejercicios conjuntos del 10 al 20 de febrero “para desarrollar medidas conjuntas para erradicar la amenaza en las fronteras de nuestro estado aliado, incluso causada por la crisis migratoria y la necesidad de estabilizar la situación humanitaria”.
Las fuerzas combinadas de las dos naciones, dijo Rybakov, organizarían la defensa de «instalaciones estratégicamente importantes» y «frenarían y evitarían la agresión externa activa».
