Manchester City supo aguantar los embates del Atlético de Madrid para terminar ganando por la mínima diferencia en el marcador global.
Los colchoneros salieron con una actitud diferente a diferencia de la ida en Etihad, pero no fue suficiente porque no estuvieron finos al momento de terminar las jugadas.
Los pupilos de Pep Guardiola tuvieron que recurrir a técnicas oscuras de fingir faltas, encarar a los rivales y desentenderse de los balones para perder tiempo.
En los minutos finales Diego Simeone echo toda la carne al asador, metió a su artillería y estuvieron cerca de mandar el juego al tiempo extra.
El defensa central, Felipe, cometió uno de sus acostumbrados errores que terminó con una tarjeta roja, condicionando el resto del encuentro, aunque no fue determinante hacia el final.
Los ciudadanos enfrentarán al Real Madrid en una ronda de semifinales sumamente interesante que medirá a dos de los mejores equipos en Europa.
