Paris, Francia. – (Agencias) Pocas personas apostaban a que al final de una semana de trabajo se llegara a un acuerdo sobre la independencia de Nueva Caledonia en París, donde se reunió, desde el 26 de mayo, a representantes de partidos políticos caledonios, leales y separatistas.
Para lograrlo, el ministro de Ultramar de Francia, Sébastien Lecornu, tuvo que “agitar la palmera”, de acuerdo con el diario francés Le Monde, y que ambas partes aceptaran salir de su zona de confort, consistente a dejar al otro la responsabilidad del fracaso.
Será el Ministro de Ultramar quien presente las conclusiones el miércoles 2 de junio al Consejo de Ministros. El referéndum deberá realizarse antes de fin de año, y en caso de ganar el Sí, seguiría un periodo de transición de dos años.
Durante tres días se realizaron reuniones en el Ministerio de Ultramar de Francia, en Balard, con el jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas, el general Lecointre, y con el Ministro de Asuntos Exteriores, Jean-Yves Le Drian, en Quai d´Orsay.
Todo sobre la base del documento elaborado por los servicios del Estado, que ha permitido conocer las consecuencias del Sí o del No a la independencia.
Un trabajo que no se realizó antes de las dos consultas anteriores sobre la independencia de Nueva Caledonia celebradas el 4 de noviembre de 2018 y el 4 e octubre de 2020, ambas ganadas por el No pero con una mayoría que se redujo del 53.26% del primero, al 46.74% del segundo.
Sea cual fuere el resultado, este tercer referéndum pondrá fin al Acuerdo de Numea del 5 de mayo de 1998, que preveía hasta 3 referéndums para definir la independencia de Nueva Caledonia,
Es necesario el debate en el Parlamento y pasar a una revisión constitucional ya que las disposiciones transitorias del Acuerdo pasaron a la Constitución.
