Estambul, Turquía. – (Agencias) Se reanudó otra ronda de conversaciones de paz entre Rusia y Ucrania en Estambul, poniendo a Turquía, un miembro de la OTAN, que tiene vínculos tanto con Kiev como con Moscú, en el centro de atención mundial como intermediario en el conflicto armado que llega a su segundo mes. El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, enfatizó su deseo de que se logre un alto al fuego en una llamada el presidente de Rusia Vladímir Putin, de acuerdo con medios turcos estatales.
El domingo, el presidente de Ucrania Volodímir Zelenski ofreció lo que parece una apertura diplomática. Dijo que Kiev podría declarar su “neutralidad” y terminar definitivamente su intento de ingresas a la OTAN en un posible acuerdo de paz con Rusia, pero dejó claro que cualquier acuerdo debe ser votado en un referéndum Nacional celebrado sin tropas rusas en el país. Esto lo declaró a un medio ruso, que el censor de Internet del Kremlin prohibió publicarla.
El lunes, Serguéi Lavrov, ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, descartó la posibilidad de que Putin y Zelenski se reúnan. Minimizó las expectativas antes de que comenzaran las conversaciones el martes.
El nuevo esfuerzo diplomático se produce cuando los combates y los bombardeos siguen aterrorizando al país. El lunes, Iryna Andriivna Vereshchuk, la viceprimerministra de Ucrania, dijo que los corredores humanitarios no estarían abiertos en la ciudad de Mariupol debido a informes de “provocaciones”, ciudad bloqueada y bombardeada durante semanas, dijo su alcalde el lunes.
La inteligencia del Pentágono sugiere que Rusia está cambiando el enfoque para controlar la región oriental de Donbas, donde los separatistas pro-Kremlin han luchado contra las fuerzas ucranianas desde 2014. El jefe de la inteligencia militar de Ucrania acusó a Rusia el domingo de intentar dominar el este y dividir su país en dos: “para crear Corea del Norte y Corea del Sur en Ucrania”.
Ambos lados han hablado de una posible fórmula bajo la cual Ucrania puede aceptar algún tipo de estatus neutral formal con garantías de seguridad internacional, pero ninguno ha cambiado sobre los reclamos territoriales de Rusia, que incluyen Crimea, incautada por Moscú en 2014, y la región oriental de Donbas.
Sin embargo, Zelenskiy insinuó posibles concesiones este fin de semana y dijo que podría ser posible algún tipo de compromiso que involucre a Donbas. No llegó a sugerir que la región podría ser cedida y enfatizó que la «integridad territorial» era la prioridad absoluta de Kiev.
Lavrov dijo que una reunión entre Putin y Zelenski, que solo se reunieron una vez, en París en 2019, sería contraproducente en esta etapa, pero agregó que sería necesaria “tan pronto como estemos cerca de resolver todos los problemas clave”. El ministro ruso repitió las demandas de Moscú de desmilitarización, “desnazificación” y futura neutralidad de Ucrania.
