Kiev, Ucrania. – (Agencias) Tras el control del sur de Ucrania, las fuerzas rusas continúan su ofensiva en Severodonetsk, ciudad que es un punto clave para controlar toda la región de Lugansk, en el Donbas, objetivo de la operación especial militar desde el 24 de febrero pasado.
Una parte militar publicado este viernes por el Estado Mayor General de las Fuerzas Armadas de Ucrania en su cuenta oficial de Facebook, informa que “los ocupantes rusos continúan disparando con cañones y cohetes contra las posiciones ucranianas”. De acuerdo con los informes, la estrategia de las fuerzas rusas se basa también en atacar a Lisichansk, ubicada a 10 kilómetyros de Severodonetsk, de esta manera, cortarían las vías de comunicación con la ciudad del este ucraniano, lo que le permitiría rodearla.
Los rusos pretenden establecer un corredor que les permita desplazarse desde el sur de Ucrania, que ya controlan, y las regiones de Donetsk y Lugansk por lo que están redoblando sus ataques en el este del país.
Severodonetsk es el último foco de resistencia en la zona del este y las fuerzas nacionalistas ucranianas que quedan se han refugiado en las instalaciones de la planta de química de Azot, donde se han refugiado los últimos defensores de la ciudad junto con poco más de 500 civiles.
La situación para ellos es desoladora. «Esto es emotivo. Tengo un nudo en la garganta. Yo crecí aquí. Hay fotos de c uando tenía cuatro años bajo esos árboles. Crecí aquí. Es una pena. Es difícil hablar…«, se lamenta Volodímir Prikhodko, de 47n alos y residente en Severodonetsk.
Los nacionalistas ucranianos que se han refugiado en la planta química, un número indeterminado, resisten a los ataques de los rusos, pero de acuerdo con la información de Moscú, algunos de ellos han comenzado a rendirse.