Madrid, España. – (Agencias) Sin el voto del ala independentista (ERC, EH Bildu y PNV), tradicionalmente en el área de influencia de la izquierda y parte del conocido “grupo de la investidura”, el gobierno del socialista Pedro Sánchez sacará la reforma laboral de último momento el día de mañana, gracias al voto de diputados ubicados en el pensamiento de derecha, como Ciudadanos (Cx), el Partido Demócrata Catalán (PdeCat) y el partido Unión del Pueblo Navarro (UPN).
Así, si no hay sorpresas, la Reforma Laboral se aprobará por la mínima votación con los 176 votos del PSOE, Podemos, Ciudadanos, PDECat, Más País, Compromiso, Teruel Existe, UPN, Coalición Canaria, Nueva Canarias y Partido Regionalista Cántabro; contra los 173 que suman el derechista Partido Popular, el ultraderechista Vox, y los independentistas ERC, PNV, EH Bildu, Junts, CUP, BNG, y el derechista Foro Asturias y el diputado escindido de Ciudadanos Pablo Cambronero.
Fue entre las filas de los diputados de Ciudadanos, menos habituales en aprobar los proyectos del gobierno de Sánchez, en dar el primer paso. Inés Arrimadas anunció que apoyaría el texto sin reclamar modificaciones para torpedear el “chantaje”, dijo, de los grupos independentistas.
Luego, el día de ayer, se anunciaron nuevos partidos que se sumaban a la aprobación de la Ley. Los de Compromís y Más País llegaron primero, siguieron los de Teruel Existe, Coalición Canaria, Nueva Canarias y Partido Regionalista Cántabro.
El PDECat no hizo público su ‘sí’ hasta la tarde del miércoles, y, finalmente, los dos diputados de UPN, que debían hacer posible la mayoría simple, anunciaron el voto a favor por la noche en conferencia de prensa desde Pamplona.
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Mañana a las 9 a.m., iniciarán los pronunciamientos de los distintos grupos parlamentarios y se calcula que se alargarán unas dos horas. Está previsto que se vote hasta la tarde.
El rompimiento con los independentistas
El resultado mañana, aparte de la aprobación, mostrara la ruptura del “grupo de la investidura”, aunque Pedro Sánchez, presidente de España, se mostró tranquilo en unas declaraciones desde la Expo de Dubái. Dijo que pese al ‘no’ de los independentistas de Esquerra Republicana de Cataluña (ERC), Junts per-Catalunya (JxCat), el Partido Nacionalista Vasco (PNV) y EH Bikdu, la estabilidad política de la legislatura está garantizada.
Dijo que el gobierno español hizo su tarea al alcanzar un acuerdo con los empresarios y sindicatos, y pidió a los “socios de la investidura” y al PP que apoyen una legislatura que trasciende símbolos e ideologías.
El gobierno mantuvo su negativa de modificar el texto acordado con los agentes sociales y que aprobó por decreto. Pese a los reclamos de ERC, no se produjo ningún acercamiento con ellos, que hoy recordaron que el equipo de Sánchez no ofreció nada. Gabriel Rufián, el portavoz en el Congreso, dijo que el gobierno era responsable de la ruptura del “grupo de la investidura”. “Creo que hay quien se ha pasado de frenado porque pensaba que nos presentaría algo y lo firmaríamos como si fueran las tablas de Moisés”.
Rufián ha dicho en declaraciones en los pasillos, que el gobierno no ofreció nada para conseguir su voto. “No se mueven en contenido, ni en garantías ni tampoco en comunicación. Si no se mueven, no podemos movernos”.
