Kabul, Afganistán. – (Agencias) El valle de Panjshir, el último territorio fuera del control del Talibán ha sido históricamente difícil de conquistar, ahí fueron derrotados los ingleses primero y, después, los soviéticos.
Lugar del León de Panjshir, Ahmad Shah Masud, lidere muyahidín, uno de los señores de la guerra y héroe de la resistencia antisoviética, que enfrentó y fue asesinado por el Talibán el 9 de septiembre de 2001, días antes del ataque a las Torres Gemelas, y padre de uno de los líderes del Frente antitalibán.
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Los talibanes se aprestan al asalto al valle, enviando cientos de combatientes a las afueras del norte del valle de Panjshir y prometiendo aplastar al incipiente movimiento de resistencia, de acuerdo con The Washington Post.
El valle de Panjshir ha sido durante mucho tiempo bastión antitalibán y, en las últimas semanas, lugar donde los líderes de la oposición y exfuncionarios del gobierno derrotado han estado tratando de reunir fuerzas contra el grupo insurgente.
Los talibanes han reaccionado rápido, después de tomar el control del resto del país. El portavoz de los milicianos, Zabihullah Mujahid, ha asegurado a través de un comunicado que las fuerzas de la resistencia están prácticamente “rodeadas”.
Agregó que los talibanes quieren evitar más combates y «resolver el problema pacíficamente a través de negociaciones».
Sin embargo, un combatiente talibán que habló de manera anónima porque no tenía autorización de hablar con los medios de comunicación, dijo a The Washington Post que los líderes talibanes habían decidido enviar combatientes al valle porque las “conversaciones con la resistencia no han dado ningún resultado”,
El domingo en la noche, los talibanes y las fuerzas de la resistencia se enfrentaron en la vecina provincia de Baghlan, según ambas partes, y la resistencia había logrado algunos avances.
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Pero de acuerdo con Mujahid, los talibanes habían tomado el control de las áreas de Bannu y Pule Hissar y los distritos de la provincia de Salah por la noche. Los combatientes estaban «en la puerta de Panjshir», dijo Mujahid.
Mientras en el valle de Panjshir, la resistencia se preparaba para enfrentar el avance de los talibanes. «Actualmente, hay calma y no hay peleas”, dijo Fahim Khan Qiami, un asistente de los líderes de la resistencia, por mensaje de texto desde Islamabad.
“Pero las fuerzas en Panjshir están listas para defenderse, si algo sucede».
Entre los líderes de la resistencia antitalibán se encuentra Ahmad Masud, hijo del León de Panjshir, y el vicepresidente del gobierno derrotado, Amrullah Saleh.
Masud declaró a Reuters que espera tener conversaciones de paz con los talibanes, pero que sus partidarios estaban listos para responder cualquier ataque.
En un recién artículo publicado en The Washington Post, Masud escribió: «Pase lo que pase, mis combatientes muyahidines y yo defenderemos Panjshir como el último bastión de la libertad afgana. Nuestra moral está intacta. Sabemos por experiencia lo que nos espera».
