París, Francia. – (Agencias) Como el periódico francés Le Monde sugiere ¿Qué valor puede tener una elección local que ha sido rechazada por el 66% de los votantes? Un récord para unas elecciones regionales y departamentales en Francia.
El domingo 20 de junio, se llevaron a cabo las elecciones regionales y departamentales en Francia y se estima entre 66.1% y el 68.6% la abstención en las elecciones.
La que supera con creces los récords de 2010 en la primera vuelta de las elecciones autonómicas (53,67%), y de 2011 para lo que entonces se llamaban las elecciones cantonales (55,68%).
A un año de las elecciones presidenciales en Francia, el panorama político ha dado un vuelco contra todo pronóstico.
La extrema derecha de la Agrupación Nacional de Marine Le Pen, sale más bajo que lo que se había anunciado.
Contra todo pronóstico también, la derecha de Los Republicanos, fundados por Jack Chirac, logran establecerse como el mejor baluarte anti-Le Pen. Y, el partido presidencial está descubriendo lo poco que pesa en el juego.
Según las encuestas de Alabe para BFM-RMC e Ipsis para France Televisions, Radio France y La Chaine Parlamentariré, la derecha del partido Los Republicanos (LR) ganaría entre el 27,2% y 29.3% de los votos.
Seguido por el partido Agrupación Nacional (RN), de extrema derecha, entre el 19.1% y 19.3%, la izquierda del Partido Socialista (PS) entre el 16.5% y el 17.6%, y por último la agrupación del presidente Macron, La Republica en Marcha (PLRM), entre el 10% y el 11%.
La derecha gana esta primera vuelta de las elecciones autonómicas. Xavier Bertrand sale ganador en los Hauts-de-France, donde el RN está detrás. Laurent Wauquiez (LR) se estima que tiene entre el 45% y el 46,8% en la región de Auvernia-Ródano-Alpes.
El PS está a la cabeza en las regiones más lejanas, como Nouvelle-Aquitaine, Occitanie y Brittany.
El domingo, unos 47. 7 millones de votantes fueron llamados a votar en la primera vuelta de las elecciones regionales o territoriales, por un lado, y las elecciones departamentales, por el otro
Para la izquierda, esta es una buena noticia porque fue inesperada. Durante la primera vuelta de las elecciones autonómicas del domingo 20 de junio, las listas de izquierdas lograron resistir y frustrar pronósticos más pesimistas.
En las cinco regiones que ya tenía el Partido Socialista (PS), y donde fue apoyado por los comunistas en estas elecciones, lograron sostener su hegemonía.
La mayoría de los trece departamentos de Occitania deberán permanecer a la izquierda, excepto Aveyron, que sigue siendo una tierra histórica de derechas, mientras que la incertidumbre permanece en los Pirineos Orientales y Gard, objetivos de la RN.
Los candidatos La France Insoumise, de Jean-Luc Mélenchon, sólo presentaron listas en cuatro regiones (Ile-de-France, Bretaña, Nouvelle-Aquitaine y Occitanie),lo que limitó sus ambiciones.
La única buena noticia para los «insusmisos» es la relativa buena puntuación de Clémentine Autain en Ile-de-France.