CulturaLado B

La campesina y su papá 2

Todo estaba planeado y ella acude a conocerlo, camina en su caballo por el rumbo donde el joven Alexéi acostumbraba a ir de cacería, no tarda tanto cuando un perro le empieza a ladrar y su caballo se asusta, en eso llega para apaciguar el alboroto. Ella le dice que no tiene miedo y ambos mantienen una charla humilde, ella se cambia el nombre para pasar desapercibida. Lisa le comenta que es hija del herrero del pueblo y él dice que es un simple ayudante, y al calor del diálogo el joven decide besarla, pero ella le pone un alto, finalmente se marchan y acuerdan verse al siguiente día.

Desde ese instante ambos se pensaban y suspiraban, él no entendía como una simple campesina había ejercido una importante atracción para su corazón, ya habían pasado dos meses de amistad y de largas caminatas por el bosque. Alexéi estaba plenamente enamorado de la campesina que se decía llamar Akulina.

Los padres de ambos ya habían limado perezas, las cosas y los vientos estaban a su favor, un día el papá de Alexéi acude a comer a la casa de Lisa, pero ella al saber la noticia, se maquilla exageradamente blanca y se pune una peluca, hasta hablaba francés para que su galán no descubriera que era la campesina de sus sueños.

No obstante, el joven no le puso atención a ella, mientras que los padres acordaban por conveniencia la unión matrimonial de sus hijos. Sin embargo, ya en casa el papá de Alexéi le dice a su hijo que tiene la obligación de casarse con Lisa, él molestamente le dice que no y su viejo le dice que sino lo obedece se olvide de la herencia.

El joven inmediatamente escribe una carta a su amada campesina, le dice Akulina me está obligando papá a casarme con Lisa, mujer que no amo, así que lo voy a desobedecer y perderé mi riqueza, pero no me importa porque te amo y quiero vivir mis días junto a ti. Trabajare y juntos saldremos adelante.

Al día siguiente Alexéi acude a la cada de Lisa, para dialogar con ella y su padre, explicarles que no se casara. Al llegar a la casa y entrar queda sorprendido porque observa que su amada Akulina está leyendo la carta y descubre que era la mismísima Lisa. Se puso tan feliz que corrió para abrazarla y besarla.

LOS RELATOS DE BELKIN, DE A. PUSHKIN. Es un libro de las ediciones en lenguas extranjeras. Con ilustraciones de D. A. Shmarinov. La obra cuenta con 31 páginas. Impreso en Moscú, Rusia en el año del 1953.

Leer a Pushkin es viajar en el tiempo a la época donde el amor y el honor jugaban un papel preponderante. En lo personal me gusta el romanticismo que tienen las historias rusas porque me recuerdan que el amor en las historias hace que los días tengan sentido. historiador82@yahoo.com