CulturaLado B

La metamorfosis, por Kafka 59

Recostados cómodamente en sus asientos, hablaron de las
perspectivas para el futuro y llegaron a la conclusión de que, vistas las
cosas más de cerca, no eran malas en absoluto, porque los tres trabajos,
a este respecto todavía no se habían preguntado realmente unos a otros,
eran sumamente buenos y, especialmente, muy prometedores para el
futuro. Pero la gran mejoría inmediata de la situación tenía que
producirse, naturalmente, con más facilidad con un cambio de casa;
ahora querían cambiarse a una más pequeña y barata, pero mejor
ubicada y, sobre todo, más práctica que la actual, que había sido
escogida por Gregorio.
Mientras hablaban así, al señor y a la señora Samsa se les ocurrió casi al
mismo tiempo, al ver a su hija cada vez más animada, que en los
últimos tiempos, a pesar de las calamidades que habían hecho palidecer
sus mejillas, se había convertido en una joven lozana y hermosa.
Tornándose cada vez más silenciosos y entendiéndose casi
inconscientemente con las miradas, pensaban que ya llegaba el
momento de buscarle un buen marido, y para ellos fue como una
confirmación de sus nuevos sueños y buenas intenciones cuando, al
final de su viaje, fue la hija quien se levantó primero y estiró su cuerpo
joven.

Con ello concluye la historia de Franz Kafka.

El libro La metamorfosis, por Franz Kafka. Es uno de los relatos de largo aliento que un lector se puede devorar en una sola noche. Espero sigan leyendo cuentos y relatos, siempre hay historias que nos permiten alegrarnos y sentirnos con diversos sentimientos. Con gusto, su amigo Javier José Rodríguez Vallejo.