Lado B

Decora tu casa para transmitir emociones

La neuroarquitectura es un nuevo modo de ver tu hogar, para crear y decorar espacios, trabajando con la influencia psicoemocional que los lugares ejercen sobre las personas. Es decir, si la practicas, conseguirás sitios que incentiven el bienestar, la felicidad y la productividad.

Cómo los colores influyen en la percepción de los espacios

La neuroarquitectura estudia y trabaja a diario cómo actúan los colores a nivel emocional. Por ejemplo, el color azul y algunos verdes intermedios ayudan en las tareas que requieren creatividad.

La forma en que se utilice el color puede llegar alterar completamente la apariencia del espacio y, al mismo tiempo, influir en el estado de ánimo y la creatividad de las personas. Si lo haces en espacios de trabajo, podrías obtener consecuencias positivas en términos de productividad y creatividad de los colaboradores.

Aprovecha los espacios verdes para el bienestar

Los espacios verdes son centrales para cualquier ser humano. La neuroarquitectura explica el por qué: la sensación de estar encerrados genera estrés y disminuye la productividad, mientras que la luz natural aumenta la concentración y favorece la calma.

El rol que juega la iluminación en un hogar

La luz natural ayuda a la concentración de las personas y genera un ambiente más amable que la luz artificial, la cual obliga al cerebro a esforzarse más en la tarea a realizar; esto termina incidiendo negativamente en la productividad. Además, la luz natural acerca a los individuos con el exterior de los espacios.

Qué importancia tienen los muebles y objetos

Otro elemento importante en la neuroarquitectura es el mobiliario y sus formas. Donde hay muchas superficies duras, se produce un eco de las ondas sonoras, causando estrés. Las formas redondeadas resultan más acogedoras; en cambio, las formas más agudas nos ponen en alerta.