Londres, Inglaterra. – (Agencias) De acuerdo con la organización internacional benéfica, Save the Children, que trabaja en el centro de detención al-Hawl en el norte de Siria, informó el hallazgo del cuerpo de dos niñas egipcias al interior del campamento.
No se identificó las causas de muerte de las dos niñas, de 12 y 15 años, por parte de la organización. Pero la agencia internacional de noticias Associated Press, citando al monitor de guerra con sede en Londres, el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, y funcionarios de las Fuerzas Democráticas Sirias (SDF) liderada por los kurdos, informaron que las niñas habían sido decapitadas y sus cuerpos arrojados al sistema de alcantarillado.
Aunque el diario estadounidense The Washington Post no pudo verificar de forma independiente los informe, se ha puesto en contacto con las SDF para obtener algún comentario al respecto. «Esta noticia es absolutamente desgarradora. Estas dos niñas quedaron atrapadas en el campamento de al-Hawl sin culpa propia», dijo el director interino de respuesta a Siria de Save the Children, Beat Rohr, en un comunicado el martes. «Su muerte es un claro recordatorio de que ningún niño debe crecer en estos campos. Seguimos instando a todos los países a repatriar a los niños atrapados en el noreste de Siria lo antes posible».
El centro de detención alberga más de 50,000 personas, más de la mitad de estos son niños, informó este mes la organización no gubernamental Médicos Sin Fronteras, que administra las instalaciones médicas de al-Hawl. Los detenidos de Siria e Irak están juntos, y los extranjeros, que suman alrededor de 11,000, se encuentran alojados por separado.
El año pasado murieron 80 niños en al-Hawl, muchos de ellos víctimas de accidentes, informó Médicos Sin Fronteras. Una creciente violencia se ha cernido en el campamento en los últimos meses. De enero a agosto se han reportado 34 presuntos asesinatos. En febrero pasado, de acuerdo con Amnistía Internacional (AI), un niño murió y tres resultaron heridos en un tiroteo de las fuerzas de seguridad kurdas, responsables de la seguridad, en el sector de extranjeros detenidos.
«Las personas en el campamento están expuestas a altos niveles de violencia, explotación y abuso a diario, mientras que los niños y otros grupos vulnerables son los más afectados por la inseguridad y la privación», dijo Médicos Sin Fronteras. La organización instó a los gobiernos extranjeros a repatriar a sus ciudadanos del campamento.
De acuerdo con el diario The Washington Post, la administración del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha tratado de persuadir a los gobiernos occidentales a repatriar a sus ciudadanos detenidos en el campamento. Irak a repatriado cientos de sus ciudadanos, pero en occidente la situación es muy lenta.
En julio pasado, Francia anunció la repatriación a 51 mujeres y niños de Siria por primera vez desde que cayó el último bastión del Estado Islámico en 2019. Por su parte, la ministra de Relaciones Exteriores de Alemania, Annalena Baerbock, anunció a principios del mes la repatriación de 7 niños, 4 mujeres y un hombre que había sido llevado de niño a Siria, todos de ciudadanía alemana. Lo que, dijo, significa que «casi todos» los casos conocidos de mujeres y niños alemanes en los campamentos sirios habían concluido.
En algunos casos, los países han cancelado la ciudadanía de sus ciudadanos detenidos en al-Hawl, como fue el caso de Shamima Begum, que era una colegiala británica de 15 años cuando viajó para unirse al grupo Estado Islámico en 2015.
