Washington, D.C. – (Agencias) Estados Unidos enfrenta una furiosa ola de la variante delta que ha vuelto a disparar los contagios y muertes en el país, en medio de la apertura de las escuelas. Los que pensaron que habían visto todo de la pandemia, se enfrentan con una terrible realidad.
Como el caso del forense del condado de Baldwin, en Alabama, Brian Pierce, quien pensó que había visto lo último de la pandemia hace meses, cuando los fallecimientos se mantuvieron en 318 durante la mayor parte de la primavera y el verano.
Pero en julio y agosto, las muertes empezaron a aumentar y la semana pasada, las cosas se pusieron tan mal, que el estado rentó un remolque como morgue temporal en el estacionamiento, de acuerdo con The Washington Post.
«Creo que la mayoría de la gente estaba pensando: ‘Somos buenos'», dijo. “La vida casi volvió a la normalidad. Ahora, les estoy diciendo a mis hijos de nuevo que por favor se queden en casa».
Lo mismo sucede a nivel nacional. Las muertes de Covid han aumentado de manera constante en las últimas semanas, registrándose un promedio de 1,500 fallecimientos diarios en los últimos siete días, después de caer a 200 en los primeros siete días de julio.
Producido esto por la altamente contagiosa variante que ha explotado en el regreso a las actividades cotidianas de decenas de millones de estadounidenses, muchos de ellos no vacunados.
Entre los fallecidos están 2 maestros en una secundaria de Texas, que murieron la semana pasada con pocos días de diferencias; un estudiante de secundaria de 13 años de Georgia y una enfermera de 37 años del sur de California, que dejo cinco hijos incluido uno recién nacido.
La diferencia en esta cuarta ola de Covid en Estados Unidos es que las crecientes tasas de vacunación han roto la relación entre contagio y muerte, en muchas zonas del país.
/cloudfront-eu-central-1.images.arcpublishing.com/prisa/R7OHS75NYV5WEPIZ2HMHMLB4QA.jpg)
De acuerdo con los datos de The Washington Post, el registro diario de los contagios está aumentando en todo el país. Pero en algunos lugares, en su mayoría estado del sur que tiene baja tasa de vacunación, están viendo un aumento paralelo de fallecimientos.
El promedio de fallecimientos diarios en siete días es un tercio de lo que fue en enero, el mes más mortal de la pandemia, pero se pronostica un aumento a medida que crece el número de hospitalizados.
Aunque la mayoría de los estados de bajo índice de vacunación tiene un aumento de muertes, no es el caso de todos.
Como Florida, donde más del 53% de la población ha recibido la dosis completa, es el estado más afectado con respecto a los fallecimientos diarios, con un promedio de 325 la última semana, junto con casi 20,000 contagios diarios.
El gobernador del estado, el republicano Ron DeSantis, ha tratado de vencer la resistencia de las juntas escolares a su mandato de prohibir el requisito de cubrebocas en las escuelas, y ha cumplido su amenaza de retenerles el salario, a pesar de que un juez federal declaró inconstitucional el mandato.
El epidemiólogo de la Escuela de Salud Pública de la Universidad John Hopkins, David Wesley Dowdy, dijo que la situación subraya las preguntas sin respuestas a 18 meses de la pandemia, y las limitaciones del pronóstico matemático para predecir las elecciones diarias de 330 millones de estadounidenses.
«El factor impulsor en la ola actual es el comportamiento humano, cómo interactúan las personas y cómo las personas responden al riesgo, y eso es realmente muy impredecible», dijo.
Lauren Ancel Meyers, directora del Consorcio de Modelado Covid-19 de la Universidad de Texas, coincidió: «Estamos en una tormenta perfecta de cambios virales y cambios de comportamiento”.
Prácticamente cada vez que los humanos han subestimado el virus y bajado la guardia, las muertes aumentaron.
