Internacional

Se estancan las conversaciones entre Kiev y Moscú 

La última ronda de conversaciones entre ambas delegaciones se celebró en Estambul a finales de marzo

Ankara, Turquía. – (Agencias) La guerra en Ucrania está en su cuarto mes, y aunque en las primeras semanas las partes mostraron un interés mutuo en el proceso de negociación, ahora los contactos oficiales entre Kiev y Moscú han quedado se han suspendido y no se ve cuando regresen.

La última ronda de conversaciones entre ambas delegaciones se celebró en Estambul a finales de marzo. La víspera, el presidente turco Recep Tayyip Erdogan volvió a sugerir a los presidentes de Rusia y Ucrania que mediaran y organizaran una reunión de representantes de ambos países con la participación de la ONU.

Recep Tayyip Erdogan

En una conversación telefónica con el presidente ruso Vladimir Putin, el presidente turco Recep Tayyip Erdogan sugirió que su país organice conversaciones de paz con Ucrania, Rusia y Naciones Unidas en Estambul, si todas las partes están de acuerdo. Los medios de comunicación estatales turcos también dicen que Erdogan sugirió crear un mecanismo de observación en Ucrania en el que Ankara podría desempeñar un cierto papel.

Vladimir Putin ha declarado en repetidas ocasiones que el proceso de negociación está congelado por culpa de la parte ucraniana, mientras que Moscú sigue abierto al diálogo. Kiev, por su parte, cree que esas declaraciones no son más que una fachada. 

Según el ministro de Exteriores de Ucrania, Dmytro Kuleba, en realidad Rusia quiere continuar con la acción militar. «Esto es todo lo que hay que saber sobre la disposición de Rusia para las conversaciones. Créanme, si quisieran tener conversaciones, se comportarían de otra manera. Rusia puede hacer cientos de declaraciones de que está abierta a las conversaciones, pero todo esto es un camuflaje clásico del KGB. Esta es la operación para disfrazar sus acciones reales. Y las acciones reales de Rusia son la continuación de la agresión y el bloqueo de los puertos ucranianos».

Por el momento, las conversaciones de paz han pasado a un segundo plano, colocando la crisis alimentaria en el primer lugar de la agenda. Debido al fuerte descenso de las exportaciones de grano ucraniano, millones de personas pueden encontrarse al borde de la inanición. En un momento en que los graneros del país están desbordados y no hay dónde almacenar la nueva cosecha.